Mañana será un día histórico, no solo para EUA, sino para el mundo entero. Resulta una desgracia que, justo en un momento histórico de coyuntura como el actual resulte que no exista la posibilidad, para los norteamericanos, de elegir una opción que realmente represente un cambio hacia una nueva política internacional y una reconstrucción, desde adentro, de los valores y la convivencia social que fueron fundamentales para el ascenso y apogeo de Estados Unidos. Valores y tradiciones, forma de vida y de hacer política, de convivencia social y de logro de bienestar que eran resumidos en la frase: American Dream. Sin embargo, todo esto ha venido deteriorándose desde los años sesenta en que la sociedad americana se subió al carro del "Estado deBienestar" y del Progresismo, traicionando su naturaleza conservadora que tenía desde los tiempos coloniales.
La realidad es que el sistema político norteamericano parece cansado y gastado: un sistema electoral indirecto, propio de las primeras constituciones escritas no tiene sentido en la época actual: los líderes de la independencia americana lo establecieron para precaver que la masa se viera dominada por los demagogos, algo entendible en una época en que la mayoría de la población o era analfabeta o tenía escasa cultura. Por otro lado, un alto nivel educativo no es vacuna u otorga inmunidad ante la demagogia: Alemania en los años 30 tenía el índice de educación más alto de toda Europa, con el mayor número de estudiantes y egresados de postgrados y sin embargo creyó en la verborrea de Hitler. Argentina también cuenta, como lo relata Alvaro Vargas Llosa con taxistas capaces de recitar a Rimbaud, pero ha sido presa de un amplio espectro de populistas, que van desde Eva Perón a los Kirchner, pasando por Menem.
Por otro lado, el bipartidismo norteamericano deja mucho que decir de que se trata, como lo presumen, de la Democracia número 1 del mundo: los dos grandes partidos son los únicos con pleno acceso a los medios y capaces de gastar cantidades archimillonarias en propaganda y actos proselitistas, la gran masa de la población desconoce la existencia de los partidos pequeños, que solo alcanzan a ocupar puestos en legislaturas locales y gobiernos municipales en pequeñas ciudades y pueblos. En este sentido, el ex líder soviético Mikhail Gorbachov tiene toda la razón al afirmar que EUA ya no es un país democrático y necesita su propia Perestroika:
http://www.cronica.com.mx/nota.php?id_nota=263934Esto está quedando en evidencia, los norteamericanos solo podrán elegir entre un populista que parece haber sacado su programa económico "Redistribuir la riqueza" del ideario de Hugo Chávez y un anciano belicoso dispuesto a continuar con una estéril y sangrienta aventura en Irak.
Como sea, y gane quien gane la elección, EUA está en una situación para la que no existe el hombre o la mujer adecuados: gane quien gane, el imperio angloamericano, junto con la civilización occidental en su conjunto, entrará en una fase pronunciada de decadencia, y al presidente que entre en posesión el 20 de enero le tocará ser el primero de una fase de transición en que el poder y la riqueza serán transferidas a los imperios asiáticos; lo único que debemos saber es cómo será esa decadencia.
Si imaginamos una presidencia de Obama, en la que además el Partido Demócrata contará con la mayoría absoluta en ambas cámaras, tendremos que el progresismo de izquierda dominará la agenda norteamericana: propuestas como el matrimonio homosexual se harán realidad a nivel nacional y el aborto, con la aprobación de la modalidad de "nacimiento parcial" y la prohibición de ayudar a los niños que sobreviven el aborto le llevarán a cotas realmente genocidas y a niveles de crueldad que harán que exista poca diferencia entre los gineco-obstétras y los matarifes de Himmler o de Beria, la decadencia moral se acelerará, sin duda. Un mensaje tendiente a enfrentar a pobres contra ricos y el hecho del profundo rencor que sienten las personas de color en EUA tras siglos de esclavitud y discriminación llevarán a un aumento de la tensión social en ese país que harán que en mucho, se "tercermundice" lo mismo, el aumento de impuestos a las empresas, alegando que son los "ricos" ahuyentará las inversiones, agravando la situación económica, que se tratará de solventar con una ambiciosa política de asistencia social financiada por el endeudamiento, ya que no se buscará el aumento de la presión fiscal sobre los norteamericanos de clase media y pobre.
A nivel internacional Obama buscará el aislamiento: buscará mejorar relaciones con Cuba, Irán, Venezuela y Rusia, pero habrá que ver si lo logra manejar inteligentemente o se comerá los anzuelos que para beneficio de sus intereses los zorros Castro, Chávez, Ahmadinejad o Putin le avienten; lo que es muy riesgoso incluso para México es que se inicie una revisión de los Tratados Comerciales suscritos con el exterior, lo que además de eliminar muchas oportunidades económicas para los estadounidenses, causará un daño total a nuestro país que en mucho ha resultado el más beneficiado del TLC como lo presentan Vargas Llosa, Montaner y Apuleyo Mendoza en su obra "El Regreso del Idiota". En cuanto a Colombia y a Perú, quedarán aislados y a merced de las fuerzas populistas-dictatoriales de Chávez, Morales y Correa, que contarán con el apoyo decidido de Moscú sin que nada lo estorbe.
Una presidencia de Mc Cain por su parte, sería igual de desastrosa: al igual que el Conde-Duque de Olivares en la España del siglo XVII, ha dicho que elige pelear y al pelear, lo mismo que el español, se encontrará con su "batalla de Rocroi" en la que perderá todo su prestigio y poder militar. Las onerosas campañas de Irak y Afganistán, donde la táctica de Al-Qaeda y demás fuerzas de la resistencia es alargar lo más que se pueda la contienda, destrozarían por completo la economía norteamericana y tras sus 4 años de gobierno el país se encontraría en una situación mucho peor a la actual en la que Bush deja sumido al país.
McCain además se enfrentaría a la oposición feroz de los medios y de una farándula que cad vez obtiene una mayor influencia en la sociedad y las decisiones de los norteamericanos. Habría un rechazo generalizado a una política conservadora postulada por la Sra. Palin, y terminarían por claudicar ante la progresía; y qué decir de los Neoconservadores, expulsados del poder junto con Bush, no cesarían en sus intentos por retornar a una posición de influencia, lo que llevaría a una situación de división y confrontación en el seno de la clase política americana, además que el periodo de 4 años de McCain, dado que por su edad, sería dificil verlo postularse por otros 4 años, sería, más que una tregua, una contienda por la sucesión muy parecida a lo que vivimos durante el sexenio de Fox, que fue una campaña electoral permanente por la presidencia en el 2006, y que aún ahora, bajo Calderón vivimos como la contienda por el 2012.
En definitiva: lo que pasa en EUA es un síntoma de la grave crisis de liderazgo que vivimos en Occidente hoy en día: por un lado, el carisma hueco, por el otro, la falta de contacto con la realidad. Lo ideal sería que llegara alguien con capacidad de asumir la posición de liderazgo que, para bien o para mal, asume EUA, pero abriendo la puerta poco a poco a compartir esa posición con China, que es el poder emergente, y con las otras potencias en ascenso, a fin de ir creando un mundo multipolar; alguien que ponga freno a las loqueras de la progresía y a la vez proponga un sistema económico racional que atraiga a la inversión en vez de ahuyentarla, y alguien que conozca a Latinoamérica y busque ayudarla para ayudarse a sí mismo y evitar la llegada del totalitarismo al continente.
Sin embargo, ese candidato no contiende en estas elecciones, y si dentro de 4 años aparece, será demasiado tarde...