La prueba nuclear de Corea del Norte parece que tendrá consecuencias inimaginables y llevarán a la modificación de la realidad geopolítica en Asia Oriental, en beneficio de los grandes imperios asiáticos: China, Japón y probablemente Rusia, y en detrimento de EUA que verá evaporarse, en el hongo nuclear, su influencia en la zona.
Corea ha sido, desde los años inmediatos a la Segunda Guerra Mundial, un puntal para la estrategia norteamericana en la región: el eterno punto de discordia en la milenaria rivalidad sino-japonesa quedó en "nada para nadie" con el norte para los rusos y el sur para los occidentales tras la sangrienta y fraticida Guerra que terminó con una tregua que ha durado poco más de 50 años hasta hoy, únicamente alteradas por escaramuzas aisladas y bravatas del régimen de Pyongyang, como ocurre hoy. Corea del Sur ha logrado, sobre todo en los últimos veinte años, un gran desarrollo económico, y en lo político ha evolucionado de un sistema autoritario y familiar que nada tenía que envidiar al régimen norteño, a uno en el que existe alternancia en el poder; sin embargo, su punto flaco ha sido que se mantiene sujeto a la tutela y protección de las armas estadounidenses; el norte, por su parte, continúa bajo los Kim, su economía es un desastre, al borde de la hambruna, se encuentra totalmente aislado del exterior salvo por China, y todos los recursos del país se dedican a mantener uno de los ejércitos más potentes del mundo que ahora, cuenta con armas nucleares.
En la pasada reunión del G20, Rusia y China plantearon el abandono del dólar por la creación de una moneda virtual internacional para las transacciones internacionales sustentada en la canasta de divisas del FMI no les hicieron caso, pero ni tardos ni perezosos, China está convirtiendo sus divisas en oro, y Rusia abandona los dólares en pos del euro y del renmibi, popularmente conocido como "yuan" chino.
Entre tanto, la crisis se agudiza en EUA, la deuda pública norteamericana baja de calificación y ni China ni Japón desean seguir prestando dinero: el crédito se encarece, los recursos disminuyen y se deja a la quiebra a General Motors, lo que debió de hacerse desde un principio en vez de tratar de rescatarla...
Pura retórica de Foxbama, digo Obama, hace 2 semanas Bernanke decía que la economía se recuperaría a fines de este año, ahora se ve que el final del túnel todavía está lejos. Ante este escenario, algunos economistas predicen que el dólar será sustituído por la divisa asiática. Estará por verse.
Lo que sí, es que mientras todos los países, hasta la Venezuela de Chávez y Brasil, están haciendo sus movimientos para obtener sus beneficios dentro del reparto del poder mundial sin un EUA como súperpotencia, México a duras penas busca no colapsar en manos de los narcopolíticos y los partidos.
DE ROJO A ¿MORADO?...
Putin y Medvedev se dirigen a ejecutar una ambiciosa reforma al Ejército Ruso, el tradicionalmente apodado "Rojo" parecía ya más bien morado, pues desde su creación por Pedro el Grande en el siglo XVII se trató de una inmensa masa de combatientes diseñada para invadir en forma demoledora a Europa o resistir una invasión de ese tipo como las encabezadas por Napoleón y Hitler: la indisciplina, pese al modelo prusiano adoptado, la desorganización logística, burocratismo y corrupción han sido sus principales defectos en todos estos siglos y han resultado en un lastre pesadísimo para el Estado Ruso, más con los recursos cortos desde la caída del sistema soviético y ahora con la baja en los precios del petróleo.
En vez de una organización divisional, que implicaba la existencia virtual de divisiones que únicamente contaban con mandos que percibían sueldos sin tener soldados en activo, pues los mismos se encuentran en la reserva y son los ciudadanos comunes que serían llamados a filas en caso de peligro, se apuesta por organizarlo en brigadas, más pequeñas y flexibles, lo que ha implicado el despido de muchos generales, jefes y oficiales, que ahora en forma descontenta engrosan las filas del paro, sin seguridad social alguna, pues ni los zares, ni los comunistas ni Putin han podido crear un sistema de pensiones y acceso a la vivienda efectivo para los feroces combatientes de la "Santa Madre Patria". Ahora, con un ejército adelgazado, se pretende contar con los recursos necesarios para ello.
Además, se apuesta por la tecnificación y la adopción de armamentos de nueva generación: el sistema "Triumf" de misiles antiaéreos, los nuevos helicópteros y el Mig 35 aparecen en el horizonte como parte de un nuevo y tecnológico ejército rojo que abandone sus estrategias y tácticas casi napoleónicas. Además, y tras la guerra en Georgia el año pasado, se adaptará no a guerras en gran escala, sino a conflictos regionales y rápidos, que parecen ser la característica actual de los conflictos armados en el siglo XXI. Por otro lado, este puede ser el primer paso para una desmilitarización de la sociedad rusa, que ha vivido enmarcada por la guerra, la disciplina y los uniformes desde que Pedro derrotara a Carlos XIII de Suecia en Poltawa.
La pregunta es qué repercusiones habrá dado el descontento entre los generales y oficiales desplazados; será la gran prueba de fuego para el régimen de Putin, que sigue ambigüo, entre la liberalización y el regreso al sovietismo.