Perdonen ustedes la caricatura de mi autoría que encabeza el post de hoy, pero mi humor negro me hizo jugar con las palabras influencia e influenza, ambas plagas que azotan nuestro país hoy en día.Parece que 7 ángeles han empezado a tocar las trompetas y otros 7 a derramar sus copas: no bastaba con la violencia del crimen organizado, ni con los desastres naturales de las tormentas del año pasado y las que vienen, no bastaba con nuestra clase política, dedicada a medrar a nuestras costillas, ni bastaba con la crisis económica ni los spots del IFE cada vez más ñoños. Ahora, nos enfrentamos a una verdadera amenaza a la salud pública: una nueva cepa del virus de la Influenza o Gripe, que empieza a atacar a la población y podría extenderse a otros países del mundo, como dice el periodista Francisco Garduño, esto es lo que nos faltaba.
En mi opinión no es ni bomba biológica ni castigo divino: es la muestra patente de nuestro tercermundismo, de nuestro fracaso como Sociedad y como Estado tras doscientos desastrosos años en que, salvo por los 30 años de Porfiriato y 70 de Priísmo en que nos impusieron la paz y el desarrollo por la fuerza no hemos hecho otra cosa que perder el tiempo y las oportunidades para ser un país grande y glorioso, pues hemos estado perpetuamente divididos y enfrentados por nuestra clase política que solo se ha dedicado a buscar el Poder al costo que sea y utilizarlopara el beneficio personal, como resultado, tenemos una sociedad corrompida desde dentro, sin moralidad, sin educación y sin cultura, irresponsable e inconsciente, y todo esto es causa de la Influenza.
¿Cómo no vamos a ser un foco de infección si basta con pasar por cualquier calle y ver los montones de basura acumulada en las aceras? Hay excepciones, por supuesto y hay municipios que han mejorado mucho el servicio de limpia, mas no la conciencia de la gente, ya somos el país con más obesos del mundo, pues la dieta de la gente consiste en consumir papitas, botanas y demás clases de frituras, refrescos y jugos químicos todo lo que viene en botes desechables y arrojarlos en la vía pública; los servicios de recolección suelen ser defectuosos y la basura se acumula en tambos que están por reventar o en pilas de bolsas donde pululan ratas, moscas y cucarachas, la gente escupe mientras camina en cualquier lado, incluso gente de alta posición económica y social lo hace y es fácil ver chicles mascados pegados en aceras, mesabancos de las escuelas y hasta bancas de las iglesias, hace poco y como parte de las obras de reforma del periférico de Guadalajara, alguien tuvo piedad de un viejo sauce que estaba en la estación de Periférico Sur del Tren Ligero que lucía el surrealista y asqueroso aspecto de tener casi toda su corteza cubierta de chicles dejados ahí por los transeuntes que bajaban del puente peatonal, y por ello, el árbol, visiblemente enfermo fue talado por su propio bien.
Los ríos contaminados, como aquí cerca de El Salto, donde ya incluso ha habido niños muertos y enfermos por los metales pesados presentes en las aguas, la deforestación, la mierda de perro aquí y alla, la sobrepoblación de canes y de gatos callejeros y en hogares, la medida de separación de basura, que está muy lejos de ser positiva: provoca más la acumulación de desechos en las casas, pues como no todos los ayuntamientos tienen los recursos suficientes para que el carretón de la basura pase diario y hasta sean dos camiones, uno para basura orgánica y otro para inorgánica, la basura se acumula, de todo tipo y pasan días o semanas para que el camión se la lleve, y ¿para qué? en los basureros no se ha implementado aún la tecnología necesaria para que la clasificación de basura y el reciclaje tengan provecho, así que llega ahí y se mezcla todo, por lo que las malas lenguas dicen que en realidad todo es negocio de algún político que desea sacar provecho de la fabricación de bolsas de colores, e incluso, desplazar a la tradicional mafia de los pepenadores para el pingüe negocio del reciclaje, que por ejemplo en China, está convirtiéndose en una veta de oportunidades increible, a grado tal de que no les basta con la propia y compran a otros países sus desechos, principalmente electrónicos.
La gente está acostumbrada a vivir mal: el sábado me deprimió enormemente ver a niños jugando en la tierra como si estuviésemos en Africa, a la gente le da lo mismo llevar sus ropas sucias con manchas de tierra como si fuesen siervos de la gleba medievales y esquivar los bodoques de mierda de la banqueta mientras caminan, y no en poco ha sido responsable el deficiente papel de nuestras autoridades: obras públicas interminables que arrojan ingentes cantidades de polvo al aire, gente que por generaciones ha vivido en pobreza extrema y sin servicios públicos básicos como el agua potable y el drenaje. Y qué decir de las viviendas de los fraccionamientos que surgen como hongos en todas las periferias de las ciudades? son casas asfixiantes, donde se encierra el calor, no hay ventilación y las familias se encuentran amontonadas al interior de espacios propios para madrigueras o calabozos medievales pero no para una vida digna.
Además, hay que agregar la existencia de miles y miles puestos de comida ambulantes, que constituyen verdaderos difusores de gérmenes ante la baja higiene que hay en ese tipo de establecimientos.
Todo esto, por supuesto, es un caldo de cultivo excelente para las epidemias y esto se percibe, basta subirse a un autobús o asistir a misa para ver como una gran cantidad de personas tose y estornuda, a pesar del calor actual, los padecimientos de vías respiratorias están sumamente extendidos. En pocas palabras, México es hoy como la Europa del siglo XIV: ciudades hacinadas, insalubres y sucias, llenas de plagas y con un nivel de vida infrahumano.
¿Qué fue de las ciudades prehispánicas de México que contaban con agua potable, drenaje, ventilación adecuada e iluminación y que hicieron que sus habitantes tuvieran un nivel de vida mejor que el de Europa Medieval? ¿Qué fue del urbanismo de las ciudades coloniales, donde los colonizadores españoles quisieron aplicar los ideales del Renacimiento sobre el urbanismo y llegaron a deslumbrar a europeos como Humboldt?
La realidad es que el sistema social, político y económico de México tras años y años de estar dominado por la corrupción y la ineficiencia está tronando: la violencia, un sistema electoral y unos partidos en los que nadie cree, instituciones ineficaces y convertidas en negocios privados, están dejando a la población vulnerable ante la mafia, las enfermedades o los desastres naturales...
La pregunta es: ¿Qué pasará cuando la gente se harte?
