1.- Afganistán:
Pues bien, el Premio Nobel de la Paz, Barack Hussein Obama, Presidente de Estados Unidos de América, ha ordenado el despliegue de una fuerza de 30,000 hombres adicionales a los 150,000 que ya se encuentran ocupando el territorio de Afganistán y ha solicitado a los países miembros de la OTAN y a algunos otros que no pertenecen a la Alianza Atlántica el aumento de sus efectivos militares en dicho país del centro de Asia.
Lo más preocupante es que ante la crisis económica, el mantenimiento de este ejército adicional supondrá un gasto de $30,000 millones de dólares anuales solamente (habrá que sumarlo al mantenimiento del resto), Obama considera además, que la presencia militar en Afganistán sólo durará tres años más, después de lo cual, se habrá conseguido la victoria, con la pacificación del país y la consolidación de las nuevas instituciones afganas, que seguirán presididas por el corrupto y fraudulento Hamid Kharzai, quien deberá compartir el poder con un alto representante de la ONU, en realidad, un virrey norteamericano.
Cada vez más, los norteamericanos repiten las mismas pésimas decisiones tomadas por los rusos en su momento, la ocupación, así, sumándole 3 años, alcanzará los 10, el mismo tiempo que el Ejército Rojo estuvo al interior del indomable país, sin haber logrado someterlo por completo nunca, terminando todo con la captura de Kabul por la insurgencia y la horrible ejecución del presidente-títere que los moscovitas habían impuesto. Entre tanto, la economía norteamericana sentirá el golpe infligido por la escalada militar y el desvío de recursos, a cambio de nada, que esta expedición supondrá para el coloso del norte. Obama, por su parte, demuestra no merecer el premio Nobel, y no dudamos que en los próximos días, en que tiene que acudir a Oslo a recibirlo, será duramente criticando... vuelvo a insistir, a mí me parece que esto fue un plan con maña para poner por los suelos su imagen pública al exterior de EUA, sabiendo que continuaría con la política belicista de Bush e incluso al interior, de hecho, uno de sus más ardientes partidarios, el documentalista Michael Moore, ha hecho pública su decepción hacia el afroamericano.
En Afganistán se juega el futuro de nuestra Civilización Occidental, y la verdad, el panorama no es nada optimista...
2.- Honduras:
Las elecciones realizadas el domingo en Honduras para elegir nuevo presidente deberían ser suficientes para poner fin al conflicto ocasionado por las intenciones de Zelaya por la reelección y la descarada intervención en su favor de potencias extranjeras como Venezuela, Brasil y Cuba, sin embargo, resulta increible que en la Cumbre Iberoamericana todavía se llame a la restitución del hombre del sombrero y se desconozcan los resultados electorales, incluso por el Presidente Calderón de México, lo que muestra otro punto negativo de su pésimo manejo hacia esta crisis, en que sigue apoyando a Zelaya aunque éste no le apoya a él, y pese a que Obama finalmente se decantó por dar su aval al proceso electoral en que Porfirio "Pepe" Lobo ganó la alta magistratura de la pequeña república.
¿Será que tanto Calderón como Zapatero y otros más en Iberoamérica, sienten pasos en la azotea de que llegue a darse un eventual movimiento en favor de su destitución, dada su manifiesta incapacidad para sortear las dificultades actuales y lograr consensos? En cuanto a Brasil y Chávez, es entendible su postura, Honduras era un jugoso manjar que ya paladeaban.
En cualquier caso, el hondurazo todavía no termina...
3.- El "Weathergate" o "Climagate":
Resulta curioso que los medios no estén dando tanta cobertura a lo que constituye un verdadero escándalo que debería tener un impacto enorme en las políticas en materia energética y ambiental; por lo pronto, parece ya estar rompiendo los consensos en torno a medidas que se tomarían en torno a la idea de que la actividad económica e industrial humana es la que está provocando un aumento en las temperaturas de los mares y de la atmósfera; si no, basta ver lo que ocurre en España, donde nadie respalda ahora la Ley de Energía Sostenible propuesta por el Gobierno que encabeza Zapatero.
Así, resulta que un hacker desveló una serie de mensajes de e-mail en los que se muestran a los científicos partidarios del cambio climático contrariados ante las mediciones del hielo del ártico y el nivel de los mares y las temperaturas atmosféricas y oceánicas, que rebaten sus argumentos en pro de un calentamiento global provocado por el ser humano, y que, si el clima cambia es por que de por sí es cambiante, así que decidieron alterar los resultados de sus investigaciones para demostrar o coincidir con lo que dicen Al Gore o Greenpeace. De igual manera, en esos mensajes se acepta que hay que exagerar y crear un estado de miedo. Los mensajes se pueden ver en la siguiente liga. Este escándalo, ya hizo que Phil Jones, el científico que encabeza al CRU "Climate Research Unit", organismo encargado de investigar sobre el cambio climático renunciara hoy.
Es curioso, esto coincide con lo que ya predecía hace unos años el difunto Michael Crichton, el famoso escritor de Ciencia-Ficción en su novela "Estado de Miedo" , este grande del género, siguiendo el ejemplo de Julio Verne, escribía siempre sus obras, incluso el guión de la serie "Emergency Room--E/R" consultando una amplia bibliografía, el Internet y muchas fuentes, que siempre colocaba al final de sus libros, por lo que podemos augurar que mucho de lo contenido en el libro responde a una realidad que se ha estado cocinando desde la década de los noventa y que obedece a intereses políticos y económicos muy claros: mantener vivo a Gore, por ejemplo, tras su derrota (amañada, eso sí) ante Bush Jr. y frenar el desarrollo industrial de las potencias emergentes, mientras EUA, Japón y Europa, con la tecnología necesaria para explotar energías alternativas y muy caras en la cúspide y con capacidad de vender esa tecnología a los países en desarrollo, lo que reactivaría sus decayentes economías.
Entonces, cabe preguntarnos: ¿a esto se está reduciendo la investigación científica en nuestros días? ¿a beneficiar intereses políticos y hasta partidistas en vez de descubrir la verdad sobre los fenómenos naturales?
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