Al acabar ayer de celebrar el Día de la Independencia de México (como siempre, en forma incorrecta, pues debería ser el 27 de septiembre en recuerdo de la entrada a la Ciudad de México del Ejército Trigarante comandado por Don Agustín de Iturbide, hecho con el que terminó la Guerra y se logró la definitiva separación del "Imperio Mexicano" de la corona española, hecho que sería desperdiciado por los "heróicos" esfuerzos de los Liberales vendidos a los intereses de EUA y a su corrupción) publico ahora un post sobre la Historia de México, por supuesto, está pendiente continuar con la serie de los Mayas y la referente a la Historia del PRI, que regresará en diciembre al poder presidencial, por ahora, ofrezco una lista aquí de los 10 mejores gobernantes que ha tenido México, muy subjetiva y no exenta de polémicas, después, en otra entrada, haré una lista de los 10 que considero peores.
Ambas listas toman en cuenta a los Virreyes de la época colonial, pues es en el Virreinato de la Nueva España en la que se da ya la unidad y la conformación de una estructura estatal, además de ser en la que se formó la mexicanidad; la época prehispánica no cuenta, dada la multitud de entidades políticas existentes, de las cuales el Imperio de la Triple Alianza (mal llamado Azteca) fue solo uno de ellas. Así pues, empecemos:
1.- Don Antonio de Mendoza y Pacheco:
Al incluir en la lista a los Virreyes, no cabe duda que éste, el primero de los representantes de la corona española en la Nueva España debe ser considerado el mayor gobernante que ha tenido México en su Historia; miembro de una de las familias de la más rancia nobleza española, Don Antonio de Mendoza recibió una Mesoamérica en 1535 anclada en la antigüedad, con una colonización europea en pañales, bajo el desgobierno de la Audiencia y la corrupción de sus oidores, los desastres y abusos de algunos Presidentes de la Audiencia como Nuño de Guzmán, el primer órgano de Gobierno, que juntaba en ella las funciones ejecutivas, legislativas y judiciales que fue establecido por el Imperio Español en los territorios recientemente conquistados; 15 años después, Mendoza dejaba a la Nueva España viviendo plenamente el Renacimiento, sin haber pasado por los mil años de la Edad Media y dotada de instituciones de avanzada: casa de moneda, imprenta, las bases para el establecimiento de la Universidad, aunque ya se habían instalado algunas otras instituciones de educación superior, como el Imperial Colegio de Santa Cruz de Tlatelolco, fundación de ciudades y minas, construcción de los puertos de Veracruz y Acapulco, un sistema de administración, persecución de la corrupción, técnicas agrícolas europeas, desarrollo de la ganadería, caminos y puentes... por todo ello, en proporción, es de estimarse que Mendoza es el mejor gobernante que ha tenido México, pues bajo su gobierno de 15 años se evolucionó lo que a Europa le había tomado 1,000, (e incluso más, pues tomemos en cuenta las herramientas neolíticas indígenas y ya para 1550, éstas habían sido totalmente abandonadas a favor de las herramientas metálicas europeas). Claro, también cometió errores, pues aunque favorable a los indígenas, atacó con crueldad excesiva algunas rebeliones y quizá tuvo un exceso de prudencia al no enfrentarse con determinación a los abusos de los encomenderos, sin embargo, la magnitud de sus logros es inmensa y desgraciadamente, muy poco conocida en México, y por supuesto, la gratitud hacia el personaje es mínima, cuando no inexistente.
2.- Don Porfirio Díaz Mori:
Sin duda el mejor gobernante que ha tenido el México Independiente, de 1821 a la fecha, el General Díaz condujo a México por el camino de la modernización y la industrialización, hizo que el país igualmente se abriera al mundo y estableciera relaciones plenas con la comunidad internacional: su gobierno fue el primero en reconocer como igual al Japón de la era Meiji y en celebrar tratados internacionales con él, estableció relaciones con la Rusia zarista, y normalizó las relaciones con las grandes potencias: Alemania, Francia, Austria-Hungría, España e Inglaterra, dañadas tras la muerte de Maximiliano y la total entrega de Juárez y Lerdo de Tejada a los intereses de Estados Unidos; México se abrió a la cultura europea y obtuvo prestigio internacional.
Díaz además garantizó la paz y la estabilidad por 30 años en el país, algo que ningún régimen en el siglo XIX mexicano había sido capaz de lograr, lo que permitió el desarrollo económico y humano, y que se expresó con el incremento de las comunicaciones, el crecimiento de las ciudades, la industrialización, la fundación de las primeras empresas mexicanas y de un sistema de banca y crédito, incluso, la aparición de un incipiente desarrollo científico.
Igualmente, cometió errores: descuidó la educación de la gran masa del pueblo, al aplicar las reformas juaristas el latifundismo se extendió y provocó la marginación de los indígenas, a los que persiguió en el caso de Yaquis y Mayas, principalmente, y el empobrecimiento de los campesinos en general, desprovistos de sus tierras, no puso en práctica una legislación que evitara una explotación despiadada de los obreros en las primeras industrias, sin embargo, todo aquello habría tenido una solución no violenta que la Revolución no permitió intentar por él o un sucesor; en el aspecto político, Díaz no planteó un régimen que sobreviviera a su persona, se dejó llevar por el caudillismo, no por la fundación de instituciones que ejerciesen el poder y tuviesen permanencia, y eso fue el punto débil de su sistema y la verdadera causa de la Revolución. En la "Historia Oficial", inventada también bajo su gobierno, Díaz ha pasado a ser recordado por lo malo, no por lo bueno, y considerado uno de los grandes villanos de la Historia nacional, incluso, continúa exiliado después de su muerte, a pesar de haber sido alguien que, como ninguno, ha amado a este país y que precisamente, demostrando su grandeza y con capacidad para haber aplastado al levantamiento de Madero, abandonó el poder y se exilió para no ser causa de derramamiento de sangre... ¡vana esperanza! los caudillos siguieron matándose entre sí por el poder.
3.- Don Lázaro Cárdenas del Río:
Hombre patriota y nacionalista, "Tata" Lázaro es, junto a Díaz el arquitecto del siglo XX mexicano y su herencia aún pervive en el XXI, él logró estabilizar y pacificar México tras la Revolución de 1910 y sus secuelas, acabar con el caudillaje de Plutarco Elías Calles y establecer un orden de instituciones permanentes en vez de que el sistema girase en torno a la personalidad de un líder, iniciándose además bajo su mandato una gran etapa de desarrollo y crecimiento económico.
Fue un conocedor a fondo de la estructura de la sociedad mexicana y su naturaleza estamental y corporativa, estableciendo el sistema político priísta construido a imagen y semejanza de esa estructura, lo que garantizaría 60 años de estabilidad política y de paz social interna apenas turbada en la década de los 70 por algunos pequeños movimientos guerrilleros, bajo su mandato se continuó con el auge cultural iniciado desde los años 20, expresado además con el inicio de la época de oro del cine nacional, y con la extensión de los servicios educativos a todo el país, abrió la puerta al exilio español y a la migración libanesa que permitió la llegada de empresarios, capitales, ingenieros, técnicos y mano de obra calificada que sería vital para el desarrollo posterior del país. Incluso, supo leer los acontecimientos internacionales a su alrededor y tomar decisiones en torno a ellos, como fue el inminente estallido de la Segunda Guerra Mundial y la nacionalización de la industria petrolera, que fue fundamental para la creación de infraestructuras.
Sus errores radicaron en el empleo de una retórica de Izquierdas que no correspondía a la realidad, pero que provocó ciertas divisiones e incomprensiones de su mandato tanto entre sus contemporáneos como posteriormente, en el empleo del populismo, el empoderamiento de los sindicatos, y la fosilización de la política, esto último quizá no tan equivocado, pues el michoacano comprobó al igual que el caso de Don Porfirio, que el secreto para gobernar México radica en tener "poca política y mucha administración".
4.- Don Carlos Salinas de Gortari:
Otro de los satanizados, Salinas es el creador de la estabilidad macroeconómica del México actual, abrió al país a la Globalización y al comercio mundial, incluso, podría plantearse que en mucho, su Gobierno fue una especie de reminiscencia a los logros de Don Porfirio Díaz a quien buscó reivindicar. Aunque avocado al Neoliberalismo, buscó que su política tuviese una dimensión social, y ahí es donde es de recordarse su programa "Solidaridad", mediante el cual buscó romper con el paternalismo del Gobierno Mexicano y estimular que las propias comunidades marginadas se organizaran y gestionaran sus propios proyectos productivos o de mejoras de infraestructuras con una intervención mínima del Estado; desgraciadamente, esta idea no ha sido continuada.
Las privatizaciones de empresas paraestatales adelgazaron el gasto público y la burocracia, renegoció la deuda externa y logró un superávit en las finanzas públicas, fue quien dio cabida a la oposición en el gradual proceso democratizador, y bajo su mandato se dieron los gobiernos estatales del PAN, mientras los municipios a cargo de la Izquierda aumentaron y en el Distrito Federal se estableció por primera vez la Asamblea de Representantes, igualmente, rompió con el anticlericalismo retórico que se había mantenido, más en las formas que en la realidad, del Estado mexicano desde el fin de la Guerra Cristera y estableció relaciones con el Estado Vaticano y reconoció la personalidad jurídica de la Iglesia Católica y demás organizaciones religiosas en el país.
Claro que cometió errores: toleró la corrupción de su hermano y algunos de sus allegados, pensó que podía crear una élite empresarial por decreto y dio los bancos a conocidos suyos que resultarían ser desastrosos o fue quien convirtió a Slim en el gran monopolista que es; igualmente, a fines de su mandato sufrió un "golpe de Estado" de parte de personajes de su círculo íntimo y de la parte más retrograda del PRI, que se espantó ante sus atrevidas reformas, con las que Salinas buscaba una renovación del sistema político mexicano, lo que se tradujo en el asesinato de su heredero designado: Luis Donaldo Colosio, así, su sucesor Zedillo cometería el grave error de liberar el tipo de cambio y para evitar ser culpado de la crisis económica de los años 1994-1995 le echó la responsabilidad a Salinas de la crisis y creó toda una "leyenda negra" alrededor del neoleonés, quien desde entonces se ha convertido en el "villano favorito" de la Historia reciente de México y sin fundamentos se le culpa de todos los males del país, de ser un poder en la sombra, eterno conspirador, haber matado al cardenal Posadas y a Colosio (cosa que habría resultado idiota de su parte haberlo hecho, cuando ambos eran verdaderos colaboradores suyos, uno para poner fin al conflicto Iglesia-Estado y otro como su amigo y continuador) cuando mucha de la estabilidad y del blindaje ante la crisis mundial actual se debe a sus acciones cuando ocupó la mansión presidencial de Los Pinos. Salinas es otro personaje que merece mejor justicia de la Historia.
5.- El Segundo Conde de Revillagigedo:
Olvidado, como la mayoría de los Virreyes españoles, Don Juan Vicente de Güemes Pacheco era en realidad, cubano, y muestra de que esa discriminación de los criollos para ocupar altos puestos públicos en la época colonial, aun en el siglo XVIII bajo los Borbón es más mito que una realidad histórica comprobada; su padre había sido también Virrey décadas antes y él, durante su adolescencia, había vivido en la capital de la Nueva España, por lo que le tenía gran cariño a estas tierras.
Su periodo de gobierno, de 1789 a 1794 se caracterizó por su gran actividad como urbanista, y por hacer más eficiente a la administración pública, embelleció a la Ciudad de México y a muchas otras en el Virreinato, creo las primeras corporaciones de policía en la capital y otras ciudades, así como fue el primero en regular la vialidad y la salubridad pública, con el servicio de recolección de basura, agua potable y alcantarillado, regularizó el servicio postal y además creó instituciones de educación superior como el Colegio de Minería y fundó muchas escuelas de educación básica populares. Igualmente combatió la criminalidad con mano dura, logrando éxitos en ello.
Fue, finalmente uno de los mejores ejemplos del lado más positivo de la Ilustración aplicada a las tareas del gobierno con su racionalidad y búsqueda de la excelencia, e incluso, por muchos es considerado el mejor Virrey en la época colonial, en su honor se nombraron las islas que México posee en el Océano Pacífico como "Islas Revillagigedo". Tenia siempre la puerta del hoy Palacio nacional y de su despacho abierta, pues recibía a cualquier persona que quisiera plantearle algún problema o elevarle una petición, fue por ello muy reconocido y querido por el pueblo de todas las clases sociales. Si en vez de entregarle el mando al Marqués de Branciforte, probablemente el peor de todos los Virreyes, lo hubiese entregado a otro igual o más capaz que él, la Independencia se habría aplazado o se habría dado en otros términos más pacíficos...
6.- Don Pedro Moya de Contreras:
Otro de los satanizados, Salinas es el creador de la estabilidad macroeconómica del México actual, abrió al país a la Globalización y al comercio mundial, incluso, podría plantearse que en mucho, su Gobierno fue una especie de reminiscencia a los logros de Don Porfirio Díaz a quien buscó reivindicar. Aunque avocado al Neoliberalismo, buscó que su política tuviese una dimensión social, y ahí es donde es de recordarse su programa "Solidaridad", mediante el cual buscó romper con el paternalismo del Gobierno Mexicano y estimular que las propias comunidades marginadas se organizaran y gestionaran sus propios proyectos productivos o de mejoras de infraestructuras con una intervención mínima del Estado; desgraciadamente, esta idea no ha sido continuada.
Las privatizaciones de empresas paraestatales adelgazaron el gasto público y la burocracia, renegoció la deuda externa y logró un superávit en las finanzas públicas, fue quien dio cabida a la oposición en el gradual proceso democratizador, y bajo su mandato se dieron los gobiernos estatales del PAN, mientras los municipios a cargo de la Izquierda aumentaron y en el Distrito Federal se estableció por primera vez la Asamblea de Representantes, igualmente, rompió con el anticlericalismo retórico que se había mantenido, más en las formas que en la realidad, del Estado mexicano desde el fin de la Guerra Cristera y estableció relaciones con el Estado Vaticano y reconoció la personalidad jurídica de la Iglesia Católica y demás organizaciones religiosas en el país.
Claro que cometió errores: toleró la corrupción de su hermano y algunos de sus allegados, pensó que podía crear una élite empresarial por decreto y dio los bancos a conocidos suyos que resultarían ser desastrosos o fue quien convirtió a Slim en el gran monopolista que es; igualmente, a fines de su mandato sufrió un "golpe de Estado" de parte de personajes de su círculo íntimo y de la parte más retrograda del PRI, que se espantó ante sus atrevidas reformas, con las que Salinas buscaba una renovación del sistema político mexicano, lo que se tradujo en el asesinato de su heredero designado: Luis Donaldo Colosio, así, su sucesor Zedillo cometería el grave error de liberar el tipo de cambio y para evitar ser culpado de la crisis económica de los años 1994-1995 le echó la responsabilidad a Salinas de la crisis y creó toda una "leyenda negra" alrededor del neoleonés, quien desde entonces se ha convertido en el "villano favorito" de la Historia reciente de México y sin fundamentos se le culpa de todos los males del país, de ser un poder en la sombra, eterno conspirador, haber matado al cardenal Posadas y a Colosio (cosa que habría resultado idiota de su parte haberlo hecho, cuando ambos eran verdaderos colaboradores suyos, uno para poner fin al conflicto Iglesia-Estado y otro como su amigo y continuador) cuando mucha de la estabilidad y del blindaje ante la crisis mundial actual se debe a sus acciones cuando ocupó la mansión presidencial de Los Pinos. Salinas es otro personaje que merece mejor justicia de la Historia.
5.- El Segundo Conde de Revillagigedo:
Su periodo de gobierno, de 1789 a 1794 se caracterizó por su gran actividad como urbanista, y por hacer más eficiente a la administración pública, embelleció a la Ciudad de México y a muchas otras en el Virreinato, creo las primeras corporaciones de policía en la capital y otras ciudades, así como fue el primero en regular la vialidad y la salubridad pública, con el servicio de recolección de basura, agua potable y alcantarillado, regularizó el servicio postal y además creó instituciones de educación superior como el Colegio de Minería y fundó muchas escuelas de educación básica populares. Igualmente combatió la criminalidad con mano dura, logrando éxitos en ello.
Fue, finalmente uno de los mejores ejemplos del lado más positivo de la Ilustración aplicada a las tareas del gobierno con su racionalidad y búsqueda de la excelencia, e incluso, por muchos es considerado el mejor Virrey en la época colonial, en su honor se nombraron las islas que México posee en el Océano Pacífico como "Islas Revillagigedo". Tenia siempre la puerta del hoy Palacio nacional y de su despacho abierta, pues recibía a cualquier persona que quisiera plantearle algún problema o elevarle una petición, fue por ello muy reconocido y querido por el pueblo de todas las clases sociales. Si en vez de entregarle el mando al Marqués de Branciforte, probablemente el peor de todos los Virreyes, lo hubiese entregado a otro igual o más capaz que él, la Independencia se habría aplazado o se habría dado en otros términos más pacíficos...
6.- Don Pedro Moya de Contreras:
Otro de los olvidados, el Doctor en Derecho Civil y Canónico, Arzobispo de México y Virrey de la Nueva España Don Pedro Moya de Contreras, natural de Córdoba, España, fue otro de los grandes virreyes en la época colonial (1584-1585); es denostado por haber sido el primer Inquisidor General en estas tierras en forma previa a ocupar el solio episcopal, para después ser nombrado visitador por el Rey y ocupar finalmente el virreinato por dos años, sin embargo, se trataba de un hombre de vastísima cultura que estimuló la educación, las ciencias y las artes (la Inquisición no estaba peleada con la ciencia, sino en el Imperio Español funcionó como un órgano de inteligencia y control político) durante su periodo al frente del gobierno, combatió la corrupción llegando a imponer castigos severísimos, como la horca a altos funcionarios que hubiesen incurrido en abusos de autoridad o hubiesen sustraído sumas del erario, como los Oidores o jueces que integraban la Audiencia, el máximo organismo judicial y legislativo del Virreinato, venció a piratas como John Hawkins y mejoró la seguridad en el Virreinato. Además, fue un hombre tan caritativo y honesto que donó de su propio dinero para la construcción de obras públicas o el socorro a los pobres; ocupó después un puesto muy alto, como ser Presidente del Consejo de Indias, máximo órgano asesor del monarca español para el gobierno del Imperio americano, y sin embargo, murió en la miseria, teniendo el Rey Felipe II que ocuparse del pago a sus acreedores y de costear su funeral. En definitiva, un hombre extraordinario que en dos años al frente de la administración de la Nueva España tuvo acciones que a otros les tomarían dos o tres periodos presidenciales.
7.- Don Adolfo Ruiz Cortines:
De él ya hablé cuando traté del periodo de apogeo del PRI, que con él probablemente llegó a su cúspide en la década de los 50: contador público, hombre sencillo y devoto, así como de una probidad extraordinaria y entregado a su trabajo como un administrador eficiente y activo. De su periodo presidencial casi no se habla por que la tranquilidad y el orden que se respiró en la República bajo su mandato fueron totales, un periodo en que el nivel de vida y de ingresos en el país fueron óptimos e hizo pensar a muchos que México estaba a solo un paso de ser un país desarrollado. El cine, la música y la televisión en sus inicios florecieron bajo su mandato (1952-1958) y la vida cultural se mantuvo en auge, el endeudamiento exterior fue mínimo, lo mismo que el gasto público que se mantuvo bajo, una política racional y moderada que contrastaría con el populismo y el derroche de la "Docena Trágica". Bajo su mandato se reconoció el derecho al voto de la mujer.
Los dos únicos aspectos negativos de su Gobierno que se recuerdan son la primera devaluación del peso frente al dólar, que sin embargo, potenció las exportaciones, y la huelga ferrocarrilera a fines de su mandato, en que se buscó la libertad sindical, cosa que no se permitió dada la misma estructura del sistema político.
Fue un presidente que, junto a su esposa, se daba el lujo de pasear por la calle como cualquier ciudadano... pregunten si Calderón lo haría ahora...
8.- Don José Joaquín de Herrera:
El único Presidente, además de Don Guadalupe Victoria y de Don Porfirio Díaz, que pudo asumir el cargo y entregarlo pacíficamente y cumplir además con su periodo constitucional de 4 años (1848-1851) en el convulso siglo XIX mexicano. Elegido Presidente después de la invasión norteamericana, utilizó la indemnización pagada por los Norteamericanos a cambio de los territorios perdidos para solventar las necesidades más urgentes de la Administración: el pago de la deuda externa con Inglaterra y el pago de salarios a la burocracia, logró una tregua en la Guerra de Castas en Yucatán y se rodeó de miembros del Partido Moderado, a fin de sacar de la lucha por el poder a Conservadores y Liberales y proceder a realizar una serie de reformas graduales y que no implicaran la ruptura violenta con el orden social o establecer leyes inaplicables como querían los Liberales ni el aventurarse a un proyecto monárquico-constitucional como los Conservadores buscaban.
Sin embargo, sus buenas intenciones y mejores oficios no bastaron, tras dejar la Presidencia, ésta quedó en manos de Don Mariano Arista, moderado como él, pero que falto de energía y lleno de temor reverente hacia su compadre Santa Anna, que caería en manos del "Plan del Hospicio", impulsado por Conservadores y Liberales por igual que establecerían al militar veracruzano en el poder dictatorial.
9.- Don Antonio María de Bucareli y Ursúa:
Caballero de la Orden de Malta, Bucareli encarna, junto a Revillagigedo el ideal del político ilustrado del siglo XVIII: durante su mandato (1771-1779) buscó dar un orden racional al urbanismo colonial y así se le recuerda en la capital por haber hecho la primera avenida ornamental, llamada "Paseo Nuevo" en su época y hoy, en su honor: "Paseo de Bucareli", desarrolló y fue pionero en ello, la investigación científica en torno a los recursos naturales del país, desarrolló grandes obras hidráulicas para el desagüe del Valle de México, mejoró la prestación de servicios de salud con la fundación de hospitales, fortificó puertos y terminó de estructurar la organización del ejército español en la Nueva España con miras a la defensa contra las amenazas británicas.
Agobiado con una enfermedad, continuó en su trabajo y murió en el desempeño de su cargo.
10.- S.M.I. Maximiliano de Habsburgo:
Figura romántica e idealista, un enigma histórico y eterna incógnita de lo que pudiera haber sido, el Emperador Maximiliano, en el corto tiempo que tuvo el poder y sobre los territorios que controló demostró haber sido una oportunidad perdida para México que se mantuvo en el subdesarrollo y la demagogia "Liberal" de Juárez y Lerdo de Tejada que benefició a los intereses norteamericanos: educado para gobernar desde la cuna, Maximiliano prometía ser un excelente monarca constitucional con un régimen respetuoso y protector de los derechos básicos de las personas, con preocupación social además, pues planteó hacer regulaciones obreras que reconociesen los derechos de los trabajadores y también respetar la identidad y la propiedad de las comunidades indígenas y campesinas, al darse cuenta que las Leyes de Reforma juaristas implicarían la marginación y sometimiento de esos grupos a la mayor servidumbre; planteó integrar a los indígenas plenamente a la sociedad, incluyendo a las tribus nómadas de "pieles rojas" en el norte y convertir a México en una potencia igual a las grandes monarquías europeas, y además planteó la libertad de cultos sin perder la identidad católica de México, siguiendo el modelo aplicado por los Habsburgo en su imperio multinacional centroeuropeo y balcánico.
Sin embargo, el abandono del apoyo francés y el superior apoyo económico, con armamento y asesores de Estados Unidos a los Liberales de Juárez lo condenaron a ser derrotado y con él, el partido Conservador, y con éste, a la derrota de México. Como en el caso de Díaz, ha sido satanizado y no existe ni la más mínima búsqueda en la enseñanza de la Historia Oficial, de alguna comprensión de su figura ni de sus partidarios, también, está a la espera de alguna reivindicación.
Y bien, esta es mi lista de los que considero los mejores 10 gobernantes de México, quizá por ahí me quedó alguno en el tintero, pero bueno, la polémica está servida. ¿Cuál es la lista de ustedes?
7.- Don Adolfo Ruiz Cortines:
De él ya hablé cuando traté del periodo de apogeo del PRI, que con él probablemente llegó a su cúspide en la década de los 50: contador público, hombre sencillo y devoto, así como de una probidad extraordinaria y entregado a su trabajo como un administrador eficiente y activo. De su periodo presidencial casi no se habla por que la tranquilidad y el orden que se respiró en la República bajo su mandato fueron totales, un periodo en que el nivel de vida y de ingresos en el país fueron óptimos e hizo pensar a muchos que México estaba a solo un paso de ser un país desarrollado. El cine, la música y la televisión en sus inicios florecieron bajo su mandato (1952-1958) y la vida cultural se mantuvo en auge, el endeudamiento exterior fue mínimo, lo mismo que el gasto público que se mantuvo bajo, una política racional y moderada que contrastaría con el populismo y el derroche de la "Docena Trágica". Bajo su mandato se reconoció el derecho al voto de la mujer.
Los dos únicos aspectos negativos de su Gobierno que se recuerdan son la primera devaluación del peso frente al dólar, que sin embargo, potenció las exportaciones, y la huelga ferrocarrilera a fines de su mandato, en que se buscó la libertad sindical, cosa que no se permitió dada la misma estructura del sistema político.
Fue un presidente que, junto a su esposa, se daba el lujo de pasear por la calle como cualquier ciudadano... pregunten si Calderón lo haría ahora...
8.- Don José Joaquín de Herrera:
El único Presidente, además de Don Guadalupe Victoria y de Don Porfirio Díaz, que pudo asumir el cargo y entregarlo pacíficamente y cumplir además con su periodo constitucional de 4 años (1848-1851) en el convulso siglo XIX mexicano. Elegido Presidente después de la invasión norteamericana, utilizó la indemnización pagada por los Norteamericanos a cambio de los territorios perdidos para solventar las necesidades más urgentes de la Administración: el pago de la deuda externa con Inglaterra y el pago de salarios a la burocracia, logró una tregua en la Guerra de Castas en Yucatán y se rodeó de miembros del Partido Moderado, a fin de sacar de la lucha por el poder a Conservadores y Liberales y proceder a realizar una serie de reformas graduales y que no implicaran la ruptura violenta con el orden social o establecer leyes inaplicables como querían los Liberales ni el aventurarse a un proyecto monárquico-constitucional como los Conservadores buscaban.
Sin embargo, sus buenas intenciones y mejores oficios no bastaron, tras dejar la Presidencia, ésta quedó en manos de Don Mariano Arista, moderado como él, pero que falto de energía y lleno de temor reverente hacia su compadre Santa Anna, que caería en manos del "Plan del Hospicio", impulsado por Conservadores y Liberales por igual que establecerían al militar veracruzano en el poder dictatorial.
9.- Don Antonio María de Bucareli y Ursúa:
Caballero de la Orden de Malta, Bucareli encarna, junto a Revillagigedo el ideal del político ilustrado del siglo XVIII: durante su mandato (1771-1779) buscó dar un orden racional al urbanismo colonial y así se le recuerda en la capital por haber hecho la primera avenida ornamental, llamada "Paseo Nuevo" en su época y hoy, en su honor: "Paseo de Bucareli", desarrolló y fue pionero en ello, la investigación científica en torno a los recursos naturales del país, desarrolló grandes obras hidráulicas para el desagüe del Valle de México, mejoró la prestación de servicios de salud con la fundación de hospitales, fortificó puertos y terminó de estructurar la organización del ejército español en la Nueva España con miras a la defensa contra las amenazas británicas.
Agobiado con una enfermedad, continuó en su trabajo y murió en el desempeño de su cargo.
10.- S.M.I. Maximiliano de Habsburgo:
Figura romántica e idealista, un enigma histórico y eterna incógnita de lo que pudiera haber sido, el Emperador Maximiliano, en el corto tiempo que tuvo el poder y sobre los territorios que controló demostró haber sido una oportunidad perdida para México que se mantuvo en el subdesarrollo y la demagogia "Liberal" de Juárez y Lerdo de Tejada que benefició a los intereses norteamericanos: educado para gobernar desde la cuna, Maximiliano prometía ser un excelente monarca constitucional con un régimen respetuoso y protector de los derechos básicos de las personas, con preocupación social además, pues planteó hacer regulaciones obreras que reconociesen los derechos de los trabajadores y también respetar la identidad y la propiedad de las comunidades indígenas y campesinas, al darse cuenta que las Leyes de Reforma juaristas implicarían la marginación y sometimiento de esos grupos a la mayor servidumbre; planteó integrar a los indígenas plenamente a la sociedad, incluyendo a las tribus nómadas de "pieles rojas" en el norte y convertir a México en una potencia igual a las grandes monarquías europeas, y además planteó la libertad de cultos sin perder la identidad católica de México, siguiendo el modelo aplicado por los Habsburgo en su imperio multinacional centroeuropeo y balcánico.
Sin embargo, el abandono del apoyo francés y el superior apoyo económico, con armamento y asesores de Estados Unidos a los Liberales de Juárez lo condenaron a ser derrotado y con él, el partido Conservador, y con éste, a la derrota de México. Como en el caso de Díaz, ha sido satanizado y no existe ni la más mínima búsqueda en la enseñanza de la Historia Oficial, de alguna comprensión de su figura ni de sus partidarios, también, está a la espera de alguna reivindicación.
Y bien, esta es mi lista de los que considero los mejores 10 gobernantes de México, quizá por ahí me quedó alguno en el tintero, pero bueno, la polémica está servida. ¿Cuál es la lista de ustedes?
3 comentarios:
Me pareció muy buena tu lista de los gobernantes. En realidad en la historia oficial si q hace falta una buena revicion imparcial honesta y profunda. Pero por elmaldito servilismo que nuestro gobierno profesa a estados unidos esto es algo muy pero muy lejano. Hoja la siga adelante con tu blg. Y que tengas muy has visitas. Nuestra nación nesecita conocer de verdad su historia, sin ídolos debronce con aspiraciones a divinidad, ni estereotipos falsamente nacionalistas q son solo satélites de ideología yanqui. Mil felicidades
Excelente lista, yo agregaría a don Gustavo Díaz Ordaz pues fue durante su gobierno que la inflación registro uno de los menores porcentajes en la historia del país, se embelleció la Cd. de México (bajo el mando de Corona del Rosal), se realizaron grandes obras de infraestructura y transporte que prevalecen hasta el día de hoy (como el sistema del Metro o las instalaciones olímpicas), apoyo la educación como en muy pocos sexenios y supo mantener el orden pese a intentos por parte de extranjeros, tanto de E.U. como de Cuba y la URSS, por desestabilizar su gobierno y con esto logro salvar a México de las dictaduras que en ese momento imperaban en Latinoamérica. Saludos y gracias por publicar algo diferente a las "versiones oficiales" de la historia de nuestro país mi amigo.
Aún me falta mucho por aprender de la época colonial de nuestro país pero considero que Don Luis de Velasco y Ruiz de Alarcón, quien fundó la Real y Pontificia Universidad de México, junto con su hijo Don Luis de Velasco y Castilla, quien inauguro la Alameda Central, merecen una mención honorífica. También Don Martín Enríquez de Almanza, quien derroto a los piratas en San Juan de Úlua y el Conde de Paredes, quien impulso la carrera de Sor Juana, el Duque de Linares, quien fundó la primera biblioteca y el primer museo de historia natural en Nueva España, el Duque de Arión, quien expulso a los corsarios de la Laguna de Términos y Don Bernardo de Gálvez, héroe de la Guerra Independencia de Estados Unidos y quien mando a construir el Catillo de Chapultepec, son algunos virreyes que también dejaron un legado positivo.
En cuanto al México Independiente, su alteza Agustín I, con quien México alcanzo su máxima extensión territorial y que los incompetentes y ambiciosos sucesores del "Dragón de Hierro" no lograron conservar. Don Miguel Miramón, Don Manuel Ávila Camacho, Don Adolfo López Mateos y Don Gustavo Díaz Ordaz son algunos otros gobernantes que aportaron obras, paz y prestigio a México.
En cuanto a los peores pues de la época virreinal el premio se lo disputan el Marqués de Branciforte y José de Iturrigaray, probablemente los individuos más corruptos e ineptos que quedaron a cargo de la Colonia, aunque la actitud prepotente y altanera del Marqués de Croix tras la expulsión de los jesuitas no ayudo a calmar a la gente que lloraba su partida y mucho tuvo que ver ese resentimiento en el inicio de la lucha por la Independencia.
Pero es sin lugar a dudas en el México Independiente donde encontramos a los peores gobernantes: Guadalupe Victoria, Vicente Guerrero, Valentín Gómez Farías, Antonio López de Santa Anna, Juan Álvarez, el endiosado por la historia oficial que en realidad fue un ser rencoroso, autoritario y servil ante los intereses de Washington: Benito Juárez, Sebastián Lerdo de Tejada, el también mitificado pero cuyo mandato fue una catástrofe para el México que había conocido la prosperidad del Porfiriato: Francisco I. Madero, la docena trágica demagoga y corrupta de Luis Echeverría y José López Portillo y pues todos los presidentes que hemos tenido desde el locuaz ranchero, ocurrente y frívolo de Guanajuato, solo han taído degracias y penurias para nuestra nación, en especial el orate demacrado que hoy tenemos por mandatario.
Ya me he extendido demasiado, solo espero que continue escribiendo y contradiciendo las mentiras que los historiadores oficiales nos han contado de la Historia de nuestra nación.
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