La moderna Ciencia Política nos dice que el gobernante, al momento de tomar decisiones, se ven influidos por factores provenientes del entorno y ante los cuales el Estado debe dar una reacción o respuesta; el internacionalista Jean Baptiste Duroselle, en su obra
Todo Imperio Perecerá, (uno de mis libros de cabecera para preparar mis clases de Ciencia Política) nos habla de las "Fuerzas Profundas" y las "Fuerzas Organizadas", por las primeras se entiende aquellas que carecen de dirección, racionalización u objetivo definido: se trata ya sea de fuerzas naturales, como terremotos, inundaciones, tsunamis, huracanes, etc. o bien sociales como migraciones, conflictos armados en otros países, crisis económicas, etc. En el caso actual de la epidemia de "Influenza Porcina", "Influenza A H1N1" o simplemente gripe, y su sobreinflada peligrosidad, sus reales efectos nocivos van más allá de los veintidós muertos, ocurridos en México, cosa que no es de alarmarse, puesto que las gripes mal cuidadas se transforman en neumonías que cobran vidas año con año, así sea en EUA, México, Burundi o Finlandia.
Como lo hemos dicho, es innegable que la epidemia se dió, no se debió a los cerdos, sino a un clima más extremoso producto de la degradación ambiental, el hacinamiento y la insalubridad presente en nuestras ciudades; en todos lados era posible percibir a los enfermos estornudando y tosiendo, y en mi propio trabajo, muchos fuimos los que padecimos de enfermedades respiratorias; sin embargo, el panorama evidentemente (y afortunadamente) no tuvo nada que ver con panoramas apocalípticos como el que Pieter Brüghel el Viejo pintara al referirse, en el siglo XVI a lo ocurrido doscientos años antes con la Peste Negra, como lo retrata en el "Triunfo de la Muerte" con la que se abre este post.
1.- La Desconfianza:
Lo que sí será más serio es el efecto que la aparición de esta enfermedad tendrá en México y en otros países: tanto en el aspecto económico como en el social el precio será muy alto. Primero que nada, la confianza en el Gobierno de Calderón se ha derrumbado estrepitosamente, lo cual, por un lado, es prueba inequívoca de que no hubo conspiración alguna en favor del gobierno, por otro lado, tal y como hablábamos en la entrada anterior, la existencia de todos esos e-mails con teorías de la conspiración sobre la Influenza es un síntoma de cómo en la sociedad mexicana y en Occidente en general la confianza en la autoridad se ha erosionado terriblemente y casi ha desaparecido, y por autoridad entendemos no solo al gobierno, sino también a las autoridades eclesiásticas, y hasta los medios masivos de comunicación y los llamados "líderes de opinión". La gente ya no cree tras años de mentiras y engaños deliberados para encubrir la corrupción o intentos de sacarle la vuelta a los problemas, de ahí que las conspiraciones tengan tanto éxito, como lo decíamos al hablar de Dan Brown y de todos los libros y novelillas folletinezcas que han surgido imitándole, o los libros y teorías extravagantes de personajes tales como Jaime Maussan, J.J. Benítez, Daniel Estulin o David Icke... y finalmente, estos mensajes que han estado circulando en la red todo este tiempo.
La verdad es que con nuestras autoridades ha pasado como con el pastor de la fábula, que tantas veces bromeaba con la aparición del lobo y resultaba falso, que cuando realmente el depredador apareció y se devoró su rebaño, nadie acudió a sus gritos de ayuda por suponerlo una mentira. Por cierto que en estos días de encierro forzoso tuve oportunidad de ver una película que trata respecto al momento en que se quebró a confianza en la autoridad en EUA: "The Pentagon Papers" con James Spader, que relata como Daniel Ellsberg, analista de la RAND Corporation, uno de los "think tanks" más importantes que ha asesorado al gobierno norteamericano en su Historia reciente, descubrió la realidad de la Guerra de Vietnam y de cómo todo se construyó sobre un tinglado con la finalidad de mantener engañado al pueblo norteamericano y conseguir el apoyo a los gobiernos: Demócratas y Republicanos que se sucedieron desde Truman hasta Nixon, siendo este último el que terminó por descubrir ante el público estadounidense todo el manejo sucio de la política en Washington: no en balde, este Presidente, pese a los indudables éxitos que tuvo y de los que hablamos en su momento, al compararlo con Bush, ha terminado siendo el villano favorito de la política gringa, apareciendo retratado así ya sea en "Watchmen" o los Simpson pues quebró la confianza de los americanos en su gobierno, y con ello, derrumbó uno de los pilares sobre los cuales se construyó el "American Dream".
En México, a decir verdad, nunca se ha confiado en la autoridad, quizá en los lejanos tiempos prehispánicos sí hubo confianza en las autoridades, amparadas bajo el halo de divinidad de las mismas, mas el trauma de la conquista que derrumbó la fe en los dioses antiguos llevó a la falta de confianza en los hasta entonces poderosos reyes y príncipes indígenas. Durante la colonia, los frecuentes abusos y malos manejos por parte de la mayoría de los virreyes y administradores coloniales, que aprovecharon encontrarse lejos de la vista del Rey o favorecidos por éste o sus gentes de confianza (hubo mucho tráfico de influencias de este tipo durante los reinados de Felipe III, Felipe IV y Carlos II, en los que los validos: Lerma, Uceda, Olivares,Valenzuela y Don Juan José de Austria medraron del erario público del Imperio y concedieron mando y gobierno a sus amigos en las colonias) llevaron a que la gente, desde indígenas a colonos europeos desconfiara tremendamente de la autoridad, depositando la confianza en la heróica Iglesia colonial, que contó con representantes de las más altas virtudes, como Zumárraga, Quiroga, Sahagún, de las Casas, Motolinía, Palafox, Junípero Serra, Kino o Alcalde y que fue la verdadera responsable del alto desarrollo alcanzado por la Nueva España en esos años.
Después, con la Independencia, las luchas de partido entre Conservadores y Liberales caracterizadas por cocinarse en el secretismo y la intriga de los templos masónicos llevaron al origen del doble discurso, simulación y manejos "en lo oscurito" que son característicos de nuestra vida pública hoy en día... con esos antecedentes: ¿Cómo no va a desconfiar la gente respecto a la existencia de la epidemia? De esta forma, lejos de lograr un beneficio, esto ha golpeado en sus cimientos al gobierno de Calderón, y en un año electoral, quién sabe como pinten las cosas para un PAN debilitado tras los escándalos de corrupción de muchos gobiernos locales, la ineficiencia y el desastre del sexenio de Fox, la violencia del narco y ahora las acusaciones, por un lado, de ineficacia ante la epidemia y por otro, de exageración ante un problema de salud que no era tan grave ( o incluso, como algunos aducen, de haberlo inventado).
La desconfianza en el gobierno puede ser muy, pero muy peligrosa... recordemos que estamos a un año del bicentenario y del centenario...
2.- La Economía dañada:
Como ya lo apuntábamos en el post anterior, nadie gana con esta epidemia, ni México, ni EUA ni Europa ni nadie... hoy me llegó otro mail que dice que Obama, para evitar entrar a seguir una política bélica que ha sido según eso el motor de la economía norteamericana desde la Segunda Guerra Muncial y mejorar la economía de su país en recesión, decidió dedicarse a prestar dinero y para esto logró el acuerdo con Calderón... la proposición es irrisoria: EUA no puede prestar lo que no tiene, esto es, dinero, y el mismo Obama solicitó al Legislativo una partida extra de $1,500 millones de dólares para hacer frente a la epidemia, mientras se encuentra recortando presupuestos, incluso afectando a la NASA (el regreso a la Luna se ve muy lejos, y más aún, la ida a Marte con naves tripuladas) y al desarrollo de nuevos armamentos, mientras que parece olvidarse de sus promesas pacifistas, pues sus aviones han matado a 100 civiles afganos y se inicia la ofensiva del Valle de Swat encabezada por el ejército pakistaní contra las fuerzas Talibán con apoyo norteamericano.
La Economía de México por su parte, se presenta ante, como diría José Alfredo Jiménez, un abismo profundo y negro como nuestra suerte, con pérdidas provocadas por la epidemia que oscilarán entre .5 y 4 puntos porcentuales del PIB, lo que nos llevará ahora sí, ante una recesión como no la habíamos visto... (el otro día yo estuve pensando en esto con un amigo: en nuestros 32 años de vida jamás hemos visto una etapa de bonanza económica, como sí la vieron nuestro padres en los años 50 y 60... hemos nacido, vivido y crecido en la crisis).
Simplemente imaginemos, ante el paro forzoso de restaurantes, giros de entretenimiento y comercios, simplemente en Guadalajara se estuvieron perdiendo $120 millones de pesos diarios... pavoroso, simplemente pavoroso.
Pero además, lo que viene: el desgaste de la imagen de México en el exterior y el error garrafal de haber identificado la Influenza con los cerdos en forma apresurada que golpea en forma directa a uno de nuestros principales productos de exportación, la descompuesta relación con China por el manejo dado por ciertas autoridades sanitarias chinas (no todas, ya que muchos de los repatriados aseguraron que no se les trató mal) hacia mexicanos, nos colocará en desventaja: muchos piden un boicot contra productos chinos, ¿realmente nos conviene alejarnos y enemistarnos con una de las economías más potentes del planeta y un socio comercial vital para el futuro solo por chauvinismo y malos entendidos o malas actuaciones de algunos funcionarios del Celeste Imperio en lo particular? Aparte, no solo China, sino Cuba, Chile, Argentina, Colombia o Ecuador y Francia pintaron también su raya con respecto a México y de ahí también las ridiculeces futboleras que hemos presenciado últimamente.
Mención aparte será la cuestión del Turismo, nuestra tercera fuente de ingresos tras el petróleo y las remesas...
¿Qué pasa si añades desempleo, pérdida de poder adquisitivo, reducción de los ingresos y aislamiento internacional con la antecitada desconfianza interna del pueblo hacia sus autoridades? ¿Obtienes un cocktail Molotov?
3.- Los abusados:
Ante río revuelto, ganancias de pescadores, dice el dicho y dice bien: y he aquí que de ultratumba aparece el Dr. Juan Ramón de la Fuente, ex rector de la UNAM, ex Secretario de Salud bajo Zedillo, pseudoizquierdista (la verdad, no hay ninguno auténtico) y eterno aspirante a la Presidencia, que de inmediato aparece ante las voceras del perredismo (Carmen Aristegui o Denisse Dresser) y aprovechando estas condiciones se coloca ya en la linea de batalla para el 2012, donde aparece como la opción de Jesús Ortega (a quien lo hemos visto lograr lo imposible, superar con sus comerciales la estupidez y ñoñería de los comerciales del IFE) en vez de Marcelo Ebrard, el candidato a control remoto de AMLO, quien intentará lo propio y por sí mismo desde el PT y Convergencia.
AMLO por su parte se vuelve vocero de los conspiracionistas contra la Influenza y hace un mitin en su natal Tabasco, pero ¡oh sorpresa! Carlos Ahumada saca su libro donde describe cómo el expresidente Salinas, Santiago Creel y Diego Fernández de Cevallos le compraron los vídeos donde aparece entregándole dinero a René Bejarano, incondicional del Peje y además asegura que éste se reunió con aquellos pero que no le llegaron al precio para ponerlo en paz...
AMLO por un lado dice que esto demuestra que existe una mafia en el poder que le robó la presidencia: nuevamente, el argumento: que Bejarano se haya llevado hasta las ligas al recibir sobornos millonarios cuya finalidad jamás se ha aclarado no es lo malo, lo malo es que se hayan hecho públicos los vídeos, cuando habla de mafia, López Obrador olvida incluirse en ella, pues en todo caso, no se trata más de una jugada sucia de políticos sucios contra otro político igual de sucio.
...Y jugando a las conspiraciones: ¿no será que la alianza anti Salinas y anti PAN encabezada por Zedillo con López Obrador se está rompiendo y ahora es la alianza Zedillo-Ortega y ahí es donde entra el Dr. De la Fuente? Está de pensarse...
En definitiva, México está sufriendo los síntomas de una grave, gravísima enfermedad, esperemos que sea posible todavía la cura y que no nos encontremos en una etapa terminal...