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14 de abril de 2009

LA DECADENCIA DE LA EDUCACION



Muy bonito rollo, ¿no? el vídeo, respecto a una conferencia impartida por el experto español en educación Juan Moya en la universidad de Granada, me fue pasado anoche en la clase de la Maestría en Ciencias de la Educación que estoy tomando como parte de mi capacitación como docente en la Universidad en la que imparto clases, y es una muestra de la doctrina de moda: la "Formación Basada en Competencias" con la que yo me manifiesto no estar del todo de acuerdo debido a mi experiencia particular y a las críticas que he visto publicadas en Internet, que creo hasta cierto punto acertadas; por otro lado, no dudo que tenga sus beneficios, sin embargo, los mismos, a mi modo de ver, no son extensibles a todos los ramos de la educación ni a todas las áreas del conocimiento.

Este nuevo sistema, ideado desde los años veinte en Estados Unidos, pero que fue desarrollado tanto en nuestro vecino del norte como en Inglaterra durante los años sesenta y setenta, para ahora, con el llamado "Plan" o "Proceso de Bolonia" convertirse en el sistema educativo impulsado en la Unión Europea y que tiene en España a su principal promotor y modelo a seguir por lo menos en lo que a Latinoamérica se refiere, y es presentado como el "non plus ultra" de la educación actual.

Se plantea que este modelo implica la interrelación entre la educación y el proceso productivo, puesto que anteriormente, el modelo tradicional, que gira en torno a la figura del docente como transmisor del conocimiento, que implica mucho el ejercicio de la memoria y la obtención de un conocimiento teórico, se encontraba divorciado del ejercicio real del alumno, al egresar del sistema educativo, en el ámbito profesional: por el contrario, con el nuevo modelo, se busca generar que el alumno contribuya por sí mismo a la construcción del conocimiento, y más que a la obtención de saberes, se busca que el alumno adquiera habilidades y capacidades, que emplee todos los recursos necesarios para la obtención por sí mismo del conocimiento, y en el proceso, la figura del docente queda reducida a la de un mero orquestador, programador o facilitador de las actividades que le llevarán a la obtención del conocimiento, pero, lo más importante, a la toma de decisiones y a la realización de actividades, con éxito, en el ámbito profesional.

La verdad, me he dado cuenta en mis compañeros de maestría, que tienen una formación mucho mayor como educadores o docentes de tiempo completo, a diferencia mía que sólo soy maestro de medio tiempo, pues me desempeño profesionalmente en el ámbito del Derecho y la docencia es una segunda actividad, importantísima para mí como parte de mi realización personal y profesional, y de desarrollo de todas mis aptitudes, que el gremio de los profesores, en cualquier nivel, desde preescolar hasta universitario, se deja llevar fácilmente por la moda, basta que expongan hablando bonito del método Montessori o la "escuela libre" o más bien hippie propuesta por un inadaptado social como era A.S. Neil para que todos digan que el pedagogo en cuestión tenía toda la razón del mundo, aunque esté en abierta contradicción con el que se había estudiado en la clase anterior y del que también se había dicho que era el más sabio entre los sabios y había dado en el clavo, es decir, es un medio en el que difícilmente se tiene consenso sobre un sistema en específico y fácilmente se adopta o desecha un método u otro, por ello, no es de extrañar que cada sexenio se pretenda, por lo menos en México, hacer una reforma educativa y modificar el sistema como si de cambiarse de camisa se tratara, el resultado: falta de continuidad y seguimiento y junto con otras cuestiones políticas e ideológicas, esto es una de las causas de nuestro atraso en la materia.

Así, ahora se plantea que el método de formación de competencias es la panacea: yo tengo mis dudas, por el contrario, creo que su aplicación, incluso en España donde se anuncia con heraldos, bombos y platillos, producirá una o varias generaciones de fracasados, de empleaditos muy capacitados para trabajar en puestos medios y subordinados, pero dificilmente producirá gente pensante y sobre todo, nos llevará al desprecio y olvido de algo muy importante: LA CULTURA que nos hace ser humanos y no máquinas parte del proceso productivo, esto me llevó a la mente las imágenes de dos clásicos del cine: "Metrópolis" de Fritz Lang y las filas interminables de obreros llevados diariamente a realizar tareas monótonas o "Tiempos Modernos" de Chaplin, donde éste es engullido por la máquina como si fuese un engrane más de la misma.

Esto viene que en el modelo que ahora se está implementando se está despreciando el conocimiento humanista: Filosofía, Historia, Ciencia Teórica, Arte, Teología y Filosofía son desechados como saberes inútiles, pues lo que importa es lo pragmático y lo inmediatamente útil, por ello, no es de extrañarse que en algunas facultades de Derecho, como en el Tecnológico de Monterrey se haya eliminado la asignatura de Derecho Romano e incentivado en cambio talleres prácticos en cuanto a los juicios orales se refiere, lo cual constituye una aberración, puesto que nuestro sistema legal es derivado directamente del creado por el antiguo pueblo itálico y lo único que logrará es crear simples técnicos positivistas y leguleyos a los que la justicia como valor a alcanzar les importará un bledo y que no comprenderá la trascendencia de la legislación y del Derecho en general, pudiendo aplicar hasta cuestiones tales como las Leyes de Nuremberg sin rechistar y sin cuestionar (aunque claro, también dependerá de ello la formación y las convicciones personales, aunque hoy en día el mundo se decanta por el borreguismo).

En los mismos videos en que se propone la educación basada en competencias, por otro lado, se plantea que la acumulación de conocimientos se está haciendo cada vez más superflua, puesto que cada vez hay más medios tecnológicos que hacen innecesario que la persona los tenga en su mente, puesto que por cualquier lado puede conectarse a Internet y entrar a Wikipedia: ¡Fantástico! aquí los españoles hacen honor a los chistes de gallegos y explican por qué están gobernados por una bola de ignorantes como el propio Rey Juan Carlos, Zapatero, Ibarrexte, José Blanco, Chaves y demás papanatas, la ignorancia ahora resulta que no es un defecto de la persona, puesto que está subsanada por el internet, esto me recuerda otro clásico del cine: "Rollerball" con Steve McQuinn, en que se borra toda la información sobre el siglo XIII de la computadora central y a nadie le importa.

Yo mismo lo veo en muchos de mis alumnos, lejos de generar personas pensantes, con espíritu investigador y creativas, la formación por competencias está produciendo gente floja, ignorante, que no ve más allá de sus narices y dependiente de las indicaciones u órdenes externas... hoy en día me topo con que muchos no saben el significado de la palabra "hostil" y por los pasillos de la escuela paso y escucho a una chava que todas, todas sus frases terminan con la palabra "güey", esto, a los partidarios del sistema por competencias no les importa, finalmente, si hacen bien su trabajo, que importa si no saben ni la o por lo redondo o tienen un vocabulario de solo 64 palabras, dirán: "que investigue" y ¿qué es investigar para ellos? cortar y pegar de wikipedia o de otros sitios de Internet como "Rincón del Vago" sin leer nada del contenido el artículo ahí publicado. Por otro lado, la idea de que la calificación y competitividad que se incentiva en el sistema tradicional se entiende como discriminación, por lo que la evaluación de las competencias no se dirige a incentivar la excelencia, sino el igualitarismo, ideal de los izquierdosos que son tan partidarios de este sistema, y que en la práctica está llevando a la mediocridad. No es de extrañarse que en Occidente, entre más se aplica el sistema de competencias, más se reduce la producción de innovaciones científicas o tecnológicas, mientras que los centros de desarrollo de esto se va a Asia: China, India, Japón, Indonesia, Malasia, Corea y hasta Irán y Emiratos Arabes, donde esquemas educativos más tradicionales se han mantenido.

Ciertamente, el esquema de formación por competencias puede ser útil en el caso de las carreras técnicas, en las que se trata de formar capacidades para actividades meramente operativas, o en las ingenierías y carreras científicas donde deben formarse capacidades para la investigación, y el sistema tradicional cubría esto: simplemente veamos, los grandes genios que llevaron a su máximo desarrollo a Occidente, desde el siglo XVI al XX, desde Descartes a Newton, de Galileo a Kepler, de Kant a Jenner, de Pasteur a Juan Pablo II, todos ellos fueron formados por el sistema tradicional, mismo que fue modelado por los Jesuitas y se mantuvo vigente durante tanto tiempo por sus evidentes ventajas: exigencia, competitividad, conservación del conocimiento, incentivo a la curiosidad, pensamiento analítico y ante todo racionalismo y no empirismo.

Pensar en adoptar un modelo tendiente a formar mediocres porque es bueno para el esquema productivo únicamente suena bastante racional, pero, la verdad, produce cierta sensación de inquietante temor: el temor a la deshumanización.
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CAPITAN CRUNCH:

Finalmente, la aventura del capitán del Maersk Alabama terminó con su rescate por los "Navy Seals" sin embargo, la verdadera solución al problema está en poner fin al vacío de poder en Somalia y brindar oportunidades de desarrollo a sus habitantes, lo cual no se hará por medios violentos, la invasión étiope orquestada por Bush a finales de su mandato sólo empeoró la situación y todo por el temor al establecimiento de un régimen islámico, teóricamente enemigo de los intereses americanos, que la verdad, en el Cuerno de Africa, parecen no ser muy importantes, por el contrario, esta odisea ha demostrado que los piratas aumentarán su atrevimiento cada vez más y se arriesgarán a ataques cada vez más osados que exigirán una intervención cada vez más violenta de las marinas de guerra de las principales potencias. Este problema puede complicarse y es necesario una intervención ordenada y a través de los instrumentos de cooperación internacionales existentes... si es que la ONU todavía sirve para algo...