En el canal de clásicos "TCM", han estado transmitiendo de nueva cuenta la excelente serie de TV: "The X Files" o en español: "Los Expedientes Secretos X", serie que originalmente fuera transmitida durante 9 temporadas, de 1993 y hasta el 2002, y que sin duda, fue emblemática de la década de los 90, dejando una enorme influencia en los realizadores de la pantalla chica que actualmente han estado intentando generar series en las que se exploten más o menos los mismos temas y estilos, en particular el un tanto sobrevalorado J.J. Abrams, quien se ha declarado admirador de la obra de Chris Carter, productor del serial sobre el que ahora tratamos.
La TV en EUA fue considerada desde los años 50 y hasta la década de 1990 como un género menor, secundario, la factura de las series de TV era con bajos presupuestos y sin pretensiones dramáticas o de alta profundidad en los argumentos y la producción, a diferencia de lo ocurrido en Inglaterra, donde la BBC hacía y hace, verdaderas obras de arte en la pantalla chica, o a México y Latinoamérica, donde la crisis de la Industria Cinematográfica llevó a que la TV se convirtiera en el medio más importante del espectáculo y las telenovelas sustituyeron a los melodramas cinematográficos como su principal modo de expresión. Claro, hubo excepciones que demostraban que la televisión podía prestarse a algo más, y así ya he hablado en este espacio de los fenómenos que representaron en los años 60 tanto la caricaturesca y Warholiana versión de Batman como "Star Trek", que hasta la fecha sigue teniendo una enorme influencia en la cultura popular.
En los 70-80, por su parte, telenovelas como "Dallas" y "Dinastía", por su parte, demostraron que la TV podía prestarse para construir historias con personajes bien diseñados, argumentos interesantes y actuaciones excelentes, recordando aquí a dos íconos como Larry Hagman (quien ya en los 60 había tenido éxito con la comedia "Mi Bella Genio" al lado de Barbara Eden) y la británica Joan Collins, que brillaron por luz propia en la TV y demostraron no necesitar al cine para lucir, al igual que el entrañable Michael Landon, la pantalla chica podía ser también un excelente medio de expresión actoral y de creación de estrellas.
A inicios de los 90, el director de cine David Lynch, famoso por sus extravagancias de cineasta independiente (recuérdese "Eraserhead") y por sus películas de suspenso y terror, produjo la miniserie "Picos Gemelos", acerca de asesinatos que ocurrían en un pequeño pueblo, así llamado, en el norteño estado de Maine; el manejo cinematográfico de las cámaras, las atmósferas oscuras, frías y húmedas, la calidad de las actuaciones y la temática del serial, que iba más allá del simple suspenso policíaco para reflejar con crítica, la vida de la sociedad norteamericana en las pequeñas comunidades rurales del norte del país, un recurso, por otro lado, tomado del escritor Stephen King que por lo general sitúa sus historias en pequeños pueblos de Maine, Nueva York, Connecticut o la Nueva Inglaterra. Los norteamericanos descubrían que la TV podía volverse artística, y podía ofrecer historias complejas y atractivas, por lo que "Twin Peaks" se ha considerado hasta ahora, como un programa televisivo revolucionario en muchos sentidos.
Chris Carter sin duda se vio influenciado tanto por la obra de Lynch como por su gusto por temas paranormales, pseudocientíficos y la fiebre extraterrestre que se desató al empezar la década, a partir de 1991, del eclipse total de sol ocurrido en julio de ese año, y que fue visible en gran parte de Norteamérica, México incluido, llevó a que la gente mirase más a los cielos y se interesara más por los fenómenos astronómicos, pero sin los conocimientos debidos, además de que los medios de comunicación, en especial aquí en nuestro país, dieron entrada mucho al sensacionalismo y a darle voz al periodista Jaime Maussan, famoso por su jugoso negocio de la "ufología", por lo que los "avistamientos" en México, EUA, Alaska y Canadá aumentaron exponencialmente, en los años siguientes, surgió la leyenda urbana del "Chupacabras", presunta bestia misteriosa que succionaba la sangre del ganado en Puerto Rico y que se extendió a todos los países del norte y centro de nuestro continente.
Sin duda, todo ello era un filón muy rico para explotar, y Carter pronto lanzó su proyecto televisivo. Para protagonistas, Carter escogió a dos actores jóvenes y sin mucha experiencia: David Duchovny, que venía de estelarizar junto a un también joven y desconocido entonces, Brad Pitt, un filme de suspenso sobre una especie de asesino serial en la carretera: "Kalifornia" que fue escogido para el papel principal, mientras que como su coprotagonista se eligió a Gillian Anderson, que tenía apenas experiencia teatral y se encontraba, y se encuentra, muy vinculada a Gran Bretaña, pese a haber nacido en EUA.
La historia se centraba en los dos personajes de Fox Mulder y Dana Scully (¿qué adolescente de los noventa no perdió la inocencia pensando en ella?), ambos agentes del FBI que se encuentran asignados a la investigación de una serie de casos archivados como los "Expedientes X" de la mencionada agencia de seguridad interna de EUA, esto por interés personal de Mulder, un brillante elemento que tiene formación profesional como psicólogo por la Universidad de Oxford, Inglaterra, cuya hermana, presuntamente, fue raptada por extraterrestres cuando eran niños. Esos expedientes, por otro lado, contienen casos ligados a supuestos avistamientos extraterrestres y fenómenos paranormales o sobrenaturales, que han quedado sin explicación. Por su parte, Dana Scully es médico y muy escéptica en torno a los casos de presencia extraterrestre, aunque no respecto a aquellos que parecen ser evidencia de la intervención divina, milagros o cuestiones espirituales dada su formación católica, en los que Mulder es escéptico a su vez. Ella originalmente es enviada a trabajar con Mulder, a fin de desacreditarlo y mantener informados a sus superiores sobre las actividades de éste, pero terminará por confiar en su compañero e incluso, enamorándose de él.
A medida que la serie avanza, la pareja protagonista descubre cómo existe toda una organización que, detrás del aparentemente Democrático gobierno norteamericano es la real detentadora del poder y se encuentra en connivencia con los extraterrestres y sus planes de intervención y colonización de la Tierra a cambio de ayuda tecnológica que contribuye a aumentar el poderío militar estadounidense, dicha organización es un verdadero "Gobierno en la Sombra" y hace todo lo posible para que Mulder no descubra la realidad ni la de a conocer al exterior.Y es que el tema central de esta serie, que duró 9 años o temporadas al aire, de 1993 al 2002, no es la cuestión extraterrestre ni los llamados OVNIs, sino la transparencia de los gobiernos y el derecho al acceso a la información de los gobernados, el derecho a que las autoridades den a conocer la verdad a las personas y permitan a éstas saber qué sentido tienen las políticas presentes, las medidas de seguridad implementadas, el destino que tienen los recursos aportados vía impuestos, no es de extrañarse que la serie fuera cancelada, pese a su enorme éxito y al cambio que había tenido en la historia, introduciendo nuevos personajes en sus últimas temporadas, como los Agentes Dogget y Reyes, o que incluso, saltara al cine, teniendo una especie de "gran episodio" en la pantalla grande, con la película "X-Files: Fight for the Future", tras los acontecimientos del 11 de septiembre de 2001 y el inicio de la Guerra en Afganistán, dado que la serie implicaba cierta desconfianza hacia el Gobierno, insinuando que siempre había detrás intereses ocultos.No en balde y salvo por la secuela a manera de epílogo que estuvo en los cines hace 4 años,"X-Files: I Want to Believe", desde la cancelación del programa, Chris Carter ha quedado completamente ajeno al mundo de la TV, pues ninguno de sus proyectos alternos a los X-Files prosperó.
Hay que reconocer que entre esos proyectos destacaba "Millenium" con el excelente pero infravalorado actor Lance Henriksen, que se centraba en la cuestión paranormal y las profecías apocalípticas que se pusieron de moda en los últimos años del siglo XX y ante la inminente llegada del año 2000, evidentemente, al aproximarse tal fecha y no verse realizada ninguna de las señales del Apocalipsis, lo que motivaba mucho la expectación de la audiencia, que se la tomaba en serio-- como ocurría también con las ideas y presuntas conspiraciones presentadas por las aventuras de Mulder-- esta serie perdió empuje y fue cancelada tras 3 temporadas.
Y así sucede, quizá como nunca y pese a que han pasado casi 20 años de que la serie diera inicio, quizá ahora resulta ser más actual que nunca (aunque a decir verdad, muy poco nos separa de los noventa: ya pueden verse teléfonos móviles, aunque bastante grandes, ya hay Internet, con foros y blogs, aunque todavía no redes sociales, la moda y los automóviles ya se ven casi actuales también) cuando vemos la crisis financiera, las intrigas político-electorales unidas con intereses empresariales, los manejos político-estratégicos detrás de la crisis en Siria y la Primavera Arabe o el programa nuclear Iraní, quizá pueda resumirse todo el sentido de la serie en la frase con la que terminaba la cortinilla al inicio de cada episodio: "La Verdad está allá Afuera".
Más que un slogan o un simple recurso mercadológico, la frase encierra el mensaje que Chris Carter quiso transmitir en esta serie televisiva, hecha en forma seria y que va más allá de una simple historia policiaca y de thriller, igual que en el caso de Lynch, creó personajes que distaron de ser monodimensionales y planos como había sido la tónica de los seriales televisivos salvo las excepciones mencionadas ; aquí se trata de un compromiso por la búsqueda de la verdad, que tampoco es presentada en términos relativistas como producto de una construcción subjetiva, por el contrario, la verdad existe, esta ahí y a la espera de que uno decida ir a buscarla, más allá de lo que digan gobiernos o los medios de comunicación. Buscar la verdad exige tanto valentía como curiosidad, y algo que queda patente en toda la serie, el empleo tanto de la razón como de la fe y la congruencia en las convicciones propias, pero con la apertura suficiente como para aceptar si se está en algún error, estas actitudes son las que hicieron que los personajes de Mulder y Scully resultasen tan interesantes y llamativos, por no decir inspiradores.
Tras el final de este serial, su influencia no se ha agotado, sino que continúa en muchos otros proyectos que vemos en la TV de nuestros días, además de permanecer como un ícono cultural, el más identificable de la década de los 90 en la TV y que generó a su alrededor todo un mundillo de novelizaciones, comics, camisetas, incluso música, con un álbum tributo, souveniers, etc. Hoy en día, en la pantalla chica podemos ver varias producciones que se encuentran directa o indirectamente inspiradas en las aventuras de Mulder y Scully, pero ninguna ha reproducido el mismo nivel de éxito.
Así tenemos el caso del realizador J.J. Abrams, quien pareció tomar la estafeta dejada por el serial de Carter con su serie "Lost" que estuvo a punto de generar un culto en torno suyo, sin embargo, la serie fue perdiendo gas durante su transmisión y al llegar a su final, que causó mucha expectativa, terminó por decepcionar a muchos de los aficionados a la misma, quizá en mucho ha pesado el hecho de que Abrams es un Judío Mesiánico, adscrito al Catolicismo y que quiso dar un mensaje religioso al desenlace de la serie en vez de buscar algo más de ciencia-ficción, que quizá hubiese sido más aceptado en el secularizado mundo actual, pero también debido a que dicho final no concuerda del todo con la trama expuesta en tantos capítulos; aun así, fue un programa muy interesante en el que se trató y se reflexionó sobre muchos conflictos y temas en torno a la naturaleza humana y la mente de sus personajes.
Posteriormente, Abrams ha intentado de nueva cuenta aproximarse a lo hecho por Carter, con seriales como "Alcatraz" donde plantea la desaparición inexplicable de los presos de la famosa cárcel californiana y su reaparición, 50 años después; aunque la premisa podría ser interesante, se debilita porque choca con la verdad histórica, pues la prisión fue cerrada durante el mandato de Kennedy, y sus reclusos, trasladados a otras penitenciarías federales, incluso tras la famosa fuga de tres prisioneros, misma que fue llevada a la pantalla por Clint Eastwood, todo lo cual fue bien conocido, publicitado y sin nada misterioso de por medio. Ante eso, ni la actuación del experimentado Sam Neil o el popular y justamente alabado por su trabajo en "Lost" Jorge García, la salvan y se ha anunciado ya su cancelación.
Otro caso similar es "Fringe", la serie que tiene más paralelismos con los "Expedientes X", que tiene en sus tres protagonistas: la australiana Anna Torv, el canadiense y conocido por la serie de amores adolescente "Dawson's Creek" Joshua Jackson y el norteamericano John Noble, que aquí hace un trabajo actoral extraordinario, su punto más fuerte, nuevamente Abrams hace una alegoría, en el personaje de Peter Bishop (Jackson)--chequen el nombre: Pedro Obispo--con Cristo al ser el nexo entre dos universos, ser levantado de la tierra y atraer a todos hacia él en una máquina creada por su padre: el loco científico Walter Bishop (Noble), todo lo cual tiene inspiración directa en las teorías teológico-geométricas de los alquimistas Jacob Boheme y Dionysos A. Freher del siglo XVIII, en sus "Hyerogliphica Sacra" que fueron muy estudiados y compartidos por el excéntrico poeta y pintor inglés William Blake, aquí un diagrama mediante el cual se buscaba dar una representación matemática al Misterio de la Redención:
Incluso, Peter desaparece tras haber logrado esa "redención o esa unión de las esferas o universos en colisión y asegurar su separación y sobrevivencia, para aparecer de nuevo después, lo que implica la muerte y la resurrección de esta metáfora del Mesías.
Igualmente, en "Fringe" es visible también una enorme influencia del misticismo psicodélico de Philip K. Dick y sus ideas respecto a viajes en el tiempo, distopias o ucronías y los Universos Paralelos, tesis también surgida actualmente de la Física Cuántica; de igual manera, los "Observadores", personajes calvos e inexpresivos que vigilan el equilibrio entre los Universos, recuerdan a los "Agentes del destino" imaginados por Dick y recientemente llevados a la pantalla grande en un filme protagonizado por Matt Damon y Emily Blunt; sin embargo, a diferencia de los "Expedientes X", en "Fringe" todo resulta ser muy monotemático, mientras que Carter exploró no solamente la cuestión extraterrestre, sino multitud de aristas de ella y otros muchos temas que generaban igual expectación entre el público, como fantasmas, criptozoología, experimentos secretos, etc., Abrams en cambio se ha concentrado en la idea de los Universos paralelos, y pese a lo interesante de sus premisas, el público en general como que no siente que haya avances en la historia, o de plano, no le entiende a las misma, por ello, y a pesar de su éxito en un grupo de fans fieles, la serie será cancelada al finalizar su quinta temporada.
Curiosamente, la serie de Abrams que más éxito ha tenido y que se está ganando el favor del público es la menos paranormal de todas: "Person of Interest", protagonizada por James Claviezel, actor a quien Abrams rescató del ostracismo al que el progresista y pro-sionista Holywood lo había condenado tras haber sido el Cristo de la "Pasión" de Mel Gibson y proclamarse abiertamente como Católico, y por otro veterano de "Lost": Michael Emerson. Aún así, la premisa es muy propia de los X-Files: todo y todos estamos vigilados.
En fin, son temas muy interesantes los que se tratan en estas series, incluso otros productos más "light", como "Supernatural" tienen también gran influencia de lo hecho por Chris Carter, sin embargo, queda claro que ninguna de éstas se aproxima al éxito que tuvo el serial televisivo de los 90; en la primera década del siglo, la serie más exitosa y que ha ocupado el lugar emblmático ha sido el "Dr. House", el trono correspondiente a esta segunda década, en la que nos encontramos, por lo pronto está vacante, por mi parte, creo que Abrams aún no produce la serie por la que pasará a la Historia, por lo pronto, lo que ha hecho en el cine: "Cloverfield", "Súper 8" o el reinicio de la saga fílmica de "Star Trek" (la influencia en este productor de esa serie de culto es también evidente), ha sido muy interesante y original; esperemos que lo haga pronto en la pantalla chica.
Por lo pronto, seguiré viendo a los "Expedientes Secretos X", me encanta la sensación de nostalgia que me produce hacerlo, me recuerda cómo los martes o los jueves, no recuerdo exactamente qué día la pasaban, yo llegaba de la Universidad a casa y mientras cenaba, acompañado de mis hermanos veíamos las aventuras de Mulder y Scully que estimulaban, como nada la imaginación, a los que no han visto la serie, les invito a hacerlo, es presenciar una experiencia de la mejor televisión que jamás se ha hecho. Aquí les dejo una probada del primer episodio, disfrútenlo:
La TV en EUA fue considerada desde los años 50 y hasta la década de 1990 como un género menor, secundario, la factura de las series de TV era con bajos presupuestos y sin pretensiones dramáticas o de alta profundidad en los argumentos y la producción, a diferencia de lo ocurrido en Inglaterra, donde la BBC hacía y hace, verdaderas obras de arte en la pantalla chica, o a México y Latinoamérica, donde la crisis de la Industria Cinematográfica llevó a que la TV se convirtiera en el medio más importante del espectáculo y las telenovelas sustituyeron a los melodramas cinematográficos como su principal modo de expresión. Claro, hubo excepciones que demostraban que la televisión podía prestarse a algo más, y así ya he hablado en este espacio de los fenómenos que representaron en los años 60 tanto la caricaturesca y Warholiana versión de Batman como "Star Trek", que hasta la fecha sigue teniendo una enorme influencia en la cultura popular.
En los 70-80, por su parte, telenovelas como "Dallas" y "Dinastía", por su parte, demostraron que la TV podía prestarse para construir historias con personajes bien diseñados, argumentos interesantes y actuaciones excelentes, recordando aquí a dos íconos como Larry Hagman (quien ya en los 60 había tenido éxito con la comedia "Mi Bella Genio" al lado de Barbara Eden) y la británica Joan Collins, que brillaron por luz propia en la TV y demostraron no necesitar al cine para lucir, al igual que el entrañable Michael Landon, la pantalla chica podía ser también un excelente medio de expresión actoral y de creación de estrellas.
A inicios de los 90, el director de cine David Lynch, famoso por sus extravagancias de cineasta independiente (recuérdese "Eraserhead") y por sus películas de suspenso y terror, produjo la miniserie "Picos Gemelos", acerca de asesinatos que ocurrían en un pequeño pueblo, así llamado, en el norteño estado de Maine; el manejo cinematográfico de las cámaras, las atmósferas oscuras, frías y húmedas, la calidad de las actuaciones y la temática del serial, que iba más allá del simple suspenso policíaco para reflejar con crítica, la vida de la sociedad norteamericana en las pequeñas comunidades rurales del norte del país, un recurso, por otro lado, tomado del escritor Stephen King que por lo general sitúa sus historias en pequeños pueblos de Maine, Nueva York, Connecticut o la Nueva Inglaterra. Los norteamericanos descubrían que la TV podía volverse artística, y podía ofrecer historias complejas y atractivas, por lo que "Twin Peaks" se ha considerado hasta ahora, como un programa televisivo revolucionario en muchos sentidos.
Chris Carter sin duda se vio influenciado tanto por la obra de Lynch como por su gusto por temas paranormales, pseudocientíficos y la fiebre extraterrestre que se desató al empezar la década, a partir de 1991, del eclipse total de sol ocurrido en julio de ese año, y que fue visible en gran parte de Norteamérica, México incluido, llevó a que la gente mirase más a los cielos y se interesara más por los fenómenos astronómicos, pero sin los conocimientos debidos, además de que los medios de comunicación, en especial aquí en nuestro país, dieron entrada mucho al sensacionalismo y a darle voz al periodista Jaime Maussan, famoso por su jugoso negocio de la "ufología", por lo que los "avistamientos" en México, EUA, Alaska y Canadá aumentaron exponencialmente, en los años siguientes, surgió la leyenda urbana del "Chupacabras", presunta bestia misteriosa que succionaba la sangre del ganado en Puerto Rico y que se extendió a todos los países del norte y centro de nuestro continente.
Sin duda, todo ello era un filón muy rico para explotar, y Carter pronto lanzó su proyecto televisivo. Para protagonistas, Carter escogió a dos actores jóvenes y sin mucha experiencia: David Duchovny, que venía de estelarizar junto a un también joven y desconocido entonces, Brad Pitt, un filme de suspenso sobre una especie de asesino serial en la carretera: "Kalifornia" que fue escogido para el papel principal, mientras que como su coprotagonista se eligió a Gillian Anderson, que tenía apenas experiencia teatral y se encontraba, y se encuentra, muy vinculada a Gran Bretaña, pese a haber nacido en EUA.
La historia se centraba en los dos personajes de Fox Mulder y Dana Scully (¿qué adolescente de los noventa no perdió la inocencia pensando en ella?), ambos agentes del FBI que se encuentran asignados a la investigación de una serie de casos archivados como los "Expedientes X" de la mencionada agencia de seguridad interna de EUA, esto por interés personal de Mulder, un brillante elemento que tiene formación profesional como psicólogo por la Universidad de Oxford, Inglaterra, cuya hermana, presuntamente, fue raptada por extraterrestres cuando eran niños. Esos expedientes, por otro lado, contienen casos ligados a supuestos avistamientos extraterrestres y fenómenos paranormales o sobrenaturales, que han quedado sin explicación. Por su parte, Dana Scully es médico y muy escéptica en torno a los casos de presencia extraterrestre, aunque no respecto a aquellos que parecen ser evidencia de la intervención divina, milagros o cuestiones espirituales dada su formación católica, en los que Mulder es escéptico a su vez. Ella originalmente es enviada a trabajar con Mulder, a fin de desacreditarlo y mantener informados a sus superiores sobre las actividades de éste, pero terminará por confiar en su compañero e incluso, enamorándose de él.
A medida que la serie avanza, la pareja protagonista descubre cómo existe toda una organización que, detrás del aparentemente Democrático gobierno norteamericano es la real detentadora del poder y se encuentra en connivencia con los extraterrestres y sus planes de intervención y colonización de la Tierra a cambio de ayuda tecnológica que contribuye a aumentar el poderío militar estadounidense, dicha organización es un verdadero "Gobierno en la Sombra" y hace todo lo posible para que Mulder no descubra la realidad ni la de a conocer al exterior.Y es que el tema central de esta serie, que duró 9 años o temporadas al aire, de 1993 al 2002, no es la cuestión extraterrestre ni los llamados OVNIs, sino la transparencia de los gobiernos y el derecho al acceso a la información de los gobernados, el derecho a que las autoridades den a conocer la verdad a las personas y permitan a éstas saber qué sentido tienen las políticas presentes, las medidas de seguridad implementadas, el destino que tienen los recursos aportados vía impuestos, no es de extrañarse que la serie fuera cancelada, pese a su enorme éxito y al cambio que había tenido en la historia, introduciendo nuevos personajes en sus últimas temporadas, como los Agentes Dogget y Reyes, o que incluso, saltara al cine, teniendo una especie de "gran episodio" en la pantalla grande, con la película "X-Files: Fight for the Future", tras los acontecimientos del 11 de septiembre de 2001 y el inicio de la Guerra en Afganistán, dado que la serie implicaba cierta desconfianza hacia el Gobierno, insinuando que siempre había detrás intereses ocultos.No en balde y salvo por la secuela a manera de epílogo que estuvo en los cines hace 4 años,"X-Files: I Want to Believe", desde la cancelación del programa, Chris Carter ha quedado completamente ajeno al mundo de la TV, pues ninguno de sus proyectos alternos a los X-Files prosperó.
Hay que reconocer que entre esos proyectos destacaba "Millenium" con el excelente pero infravalorado actor Lance Henriksen, que se centraba en la cuestión paranormal y las profecías apocalípticas que se pusieron de moda en los últimos años del siglo XX y ante la inminente llegada del año 2000, evidentemente, al aproximarse tal fecha y no verse realizada ninguna de las señales del Apocalipsis, lo que motivaba mucho la expectación de la audiencia, que se la tomaba en serio-- como ocurría también con las ideas y presuntas conspiraciones presentadas por las aventuras de Mulder-- esta serie perdió empuje y fue cancelada tras 3 temporadas.
Y así sucede, quizá como nunca y pese a que han pasado casi 20 años de que la serie diera inicio, quizá ahora resulta ser más actual que nunca (aunque a decir verdad, muy poco nos separa de los noventa: ya pueden verse teléfonos móviles, aunque bastante grandes, ya hay Internet, con foros y blogs, aunque todavía no redes sociales, la moda y los automóviles ya se ven casi actuales también) cuando vemos la crisis financiera, las intrigas político-electorales unidas con intereses empresariales, los manejos político-estratégicos detrás de la crisis en Siria y la Primavera Arabe o el programa nuclear Iraní, quizá pueda resumirse todo el sentido de la serie en la frase con la que terminaba la cortinilla al inicio de cada episodio: "La Verdad está allá Afuera".
Más que un slogan o un simple recurso mercadológico, la frase encierra el mensaje que Chris Carter quiso transmitir en esta serie televisiva, hecha en forma seria y que va más allá de una simple historia policiaca y de thriller, igual que en el caso de Lynch, creó personajes que distaron de ser monodimensionales y planos como había sido la tónica de los seriales televisivos salvo las excepciones mencionadas ; aquí se trata de un compromiso por la búsqueda de la verdad, que tampoco es presentada en términos relativistas como producto de una construcción subjetiva, por el contrario, la verdad existe, esta ahí y a la espera de que uno decida ir a buscarla, más allá de lo que digan gobiernos o los medios de comunicación. Buscar la verdad exige tanto valentía como curiosidad, y algo que queda patente en toda la serie, el empleo tanto de la razón como de la fe y la congruencia en las convicciones propias, pero con la apertura suficiente como para aceptar si se está en algún error, estas actitudes son las que hicieron que los personajes de Mulder y Scully resultasen tan interesantes y llamativos, por no decir inspiradores.
Tras el final de este serial, su influencia no se ha agotado, sino que continúa en muchos otros proyectos que vemos en la TV de nuestros días, además de permanecer como un ícono cultural, el más identificable de la década de los 90 en la TV y que generó a su alrededor todo un mundillo de novelizaciones, comics, camisetas, incluso música, con un álbum tributo, souveniers, etc. Hoy en día, en la pantalla chica podemos ver varias producciones que se encuentran directa o indirectamente inspiradas en las aventuras de Mulder y Scully, pero ninguna ha reproducido el mismo nivel de éxito.
Así tenemos el caso del realizador J.J. Abrams, quien pareció tomar la estafeta dejada por el serial de Carter con su serie "Lost" que estuvo a punto de generar un culto en torno suyo, sin embargo, la serie fue perdiendo gas durante su transmisión y al llegar a su final, que causó mucha expectativa, terminó por decepcionar a muchos de los aficionados a la misma, quizá en mucho ha pesado el hecho de que Abrams es un Judío Mesiánico, adscrito al Catolicismo y que quiso dar un mensaje religioso al desenlace de la serie en vez de buscar algo más de ciencia-ficción, que quizá hubiese sido más aceptado en el secularizado mundo actual, pero también debido a que dicho final no concuerda del todo con la trama expuesta en tantos capítulos; aun así, fue un programa muy interesante en el que se trató y se reflexionó sobre muchos conflictos y temas en torno a la naturaleza humana y la mente de sus personajes.
Posteriormente, Abrams ha intentado de nueva cuenta aproximarse a lo hecho por Carter, con seriales como "Alcatraz" donde plantea la desaparición inexplicable de los presos de la famosa cárcel californiana y su reaparición, 50 años después; aunque la premisa podría ser interesante, se debilita porque choca con la verdad histórica, pues la prisión fue cerrada durante el mandato de Kennedy, y sus reclusos, trasladados a otras penitenciarías federales, incluso tras la famosa fuga de tres prisioneros, misma que fue llevada a la pantalla por Clint Eastwood, todo lo cual fue bien conocido, publicitado y sin nada misterioso de por medio. Ante eso, ni la actuación del experimentado Sam Neil o el popular y justamente alabado por su trabajo en "Lost" Jorge García, la salvan y se ha anunciado ya su cancelación.
Otro caso similar es "Fringe", la serie que tiene más paralelismos con los "Expedientes X", que tiene en sus tres protagonistas: la australiana Anna Torv, el canadiense y conocido por la serie de amores adolescente "Dawson's Creek" Joshua Jackson y el norteamericano John Noble, que aquí hace un trabajo actoral extraordinario, su punto más fuerte, nuevamente Abrams hace una alegoría, en el personaje de Peter Bishop (Jackson)--chequen el nombre: Pedro Obispo--con Cristo al ser el nexo entre dos universos, ser levantado de la tierra y atraer a todos hacia él en una máquina creada por su padre: el loco científico Walter Bishop (Noble), todo lo cual tiene inspiración directa en las teorías teológico-geométricas de los alquimistas Jacob Boheme y Dionysos A. Freher del siglo XVIII, en sus "Hyerogliphica Sacra" que fueron muy estudiados y compartidos por el excéntrico poeta y pintor inglés William Blake, aquí un diagrama mediante el cual se buscaba dar una representación matemática al Misterio de la Redención:
Igualmente, en "Fringe" es visible también una enorme influencia del misticismo psicodélico de Philip K. Dick y sus ideas respecto a viajes en el tiempo, distopias o ucronías y los Universos Paralelos, tesis también surgida actualmente de la Física Cuántica; de igual manera, los "Observadores", personajes calvos e inexpresivos que vigilan el equilibrio entre los Universos, recuerdan a los "Agentes del destino" imaginados por Dick y recientemente llevados a la pantalla grande en un filme protagonizado por Matt Damon y Emily Blunt; sin embargo, a diferencia de los "Expedientes X", en "Fringe" todo resulta ser muy monotemático, mientras que Carter exploró no solamente la cuestión extraterrestre, sino multitud de aristas de ella y otros muchos temas que generaban igual expectación entre el público, como fantasmas, criptozoología, experimentos secretos, etc., Abrams en cambio se ha concentrado en la idea de los Universos paralelos, y pese a lo interesante de sus premisas, el público en general como que no siente que haya avances en la historia, o de plano, no le entiende a las misma, por ello, y a pesar de su éxito en un grupo de fans fieles, la serie será cancelada al finalizar su quinta temporada.
Curiosamente, la serie de Abrams que más éxito ha tenido y que se está ganando el favor del público es la menos paranormal de todas: "Person of Interest", protagonizada por James Claviezel, actor a quien Abrams rescató del ostracismo al que el progresista y pro-sionista Holywood lo había condenado tras haber sido el Cristo de la "Pasión" de Mel Gibson y proclamarse abiertamente como Católico, y por otro veterano de "Lost": Michael Emerson. Aún así, la premisa es muy propia de los X-Files: todo y todos estamos vigilados.
En fin, son temas muy interesantes los que se tratan en estas series, incluso otros productos más "light", como "Supernatural" tienen también gran influencia de lo hecho por Chris Carter, sin embargo, queda claro que ninguna de éstas se aproxima al éxito que tuvo el serial televisivo de los 90; en la primera década del siglo, la serie más exitosa y que ha ocupado el lugar emblmático ha sido el "Dr. House", el trono correspondiente a esta segunda década, en la que nos encontramos, por lo pronto está vacante, por mi parte, creo que Abrams aún no produce la serie por la que pasará a la Historia, por lo pronto, lo que ha hecho en el cine: "Cloverfield", "Súper 8" o el reinicio de la saga fílmica de "Star Trek" (la influencia en este productor de esa serie de culto es también evidente), ha sido muy interesante y original; esperemos que lo haga pronto en la pantalla chica.
Por lo pronto, seguiré viendo a los "Expedientes Secretos X", me encanta la sensación de nostalgia que me produce hacerlo, me recuerda cómo los martes o los jueves, no recuerdo exactamente qué día la pasaban, yo llegaba de la Universidad a casa y mientras cenaba, acompañado de mis hermanos veíamos las aventuras de Mulder y Scully que estimulaban, como nada la imaginación, a los que no han visto la serie, les invito a hacerlo, es presenciar una experiencia de la mejor televisión que jamás se ha hecho. Aquí les dejo una probada del primer episodio, disfrútenlo:
2 comentarios:
Y mira que últimamente me han rondado muco esos temas por la cabeza...
saludos
Excelente entrada generalista, comparando con otras del mismo género o similares y con un punto de vista muy particular también y sensaciones propias. No es fácil hacer eso.
Felicitaciones.
Estoy volviendo a ver la serie desde el comienzo (algunos capítulos nunca los había visto), y por ahora salió esto:
https://frodorock.blogspot.com.ar/2018/02/en-busca-de-lo-mejor-de-x-files.html
Voy a dar una vuelta por tu blog, que veo que es bastante completo y ya tiene varios años
Abrazo!
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