La trilogía fílmica de Christopher Nolan, hoy por hoy, uno de los mejores cineastas británicos llegados a Hollywood, basada en el personaje de DC Comics, llega a su fin; el resultado no puede calificarse más que de excelente y que ha sido, probablemente, la mejor adaptación jamás hecha de un personaje de las historietas de súperheroes, y eso que, en buena parte, la visión de Nolan es una "versión libre" del personaje, donde lo desconecta del resto del "Universo DC" y aún lo priva de Robin, su compañero y pupilo en los comics, pero sin embargo, respeta como ninguno la esencia atormentada y resentida del hombre-murciélago.
Este personaje, creación de Bob Kane y Bill Finger, resulta bastante complejo y oscuro, y no cabe duda que es el mayor del género, y que supera, con mucho, aún las creaciones de Stan Lee de las que hablábamos hace unos posts, dadas las numerosas aristas que posee y las diferentes visiones que pueden darse sobre el personaje. Si la obra de Lee tiene una gran sentido de la realidad y de lo cotidiano, el personaje de Kane, aparte de ser el más realista y plausible de los súperheroes, pues carece de poderes o habilidades especiales, salvo un enorme presupuesto, pues la Revista Forbes incluso ha hecho una lista de los personajes ficticios más ricos, estimando que el alter-ego de Batman: Bruce Wayne, posee una fortuna de siete mil millones de dólares, también empalma con la realidad pese a encontrarse en un entorno enteramente ficticio como es Ciudad Gótica, (en inglés: Gotham City es un antiguo sobre nombre de Nueva York, derivado del poblado inglés de Gotham que significa "lugar de cabras" en Ingles antiguo, al cual una leyenda atribuía estar habitado por locos e idiotas, y que también puede leerse como "God-damn", esto es: "maldita por Dios") pero en sus aspectos más oscuros: sumergirse en el personaje de Batman es entrar en recovecos oscuros de la psicología humana, en un personaje que constantemente se mueve en la cuerda floja entre la razón y la demencia, mientras que su entorno se encuentra también diariamente amenazado por el caos, la anarquía y la corrupción.
La trilogía de Nolan por ello destaca, pues ha ingresado directamente en esos oscuros rincones del personaje, superando por mucho a lo hecho por Tim Burton en su visión fílmica del personaje en "Batman" de 1988 y "Batman Returns" de 1992, en las que, debido a sus muy peculiares gustos, apostó por los aspectos grotescos y caricaturescos de la historia del personaje y algunos de sus villanos, mientras que las dos versiones de Joel Schumacher: "Batman Forever" (1995) y "Batman and Robin" (1997) fueron bastantes flojas y más cercanas a la visión pop y camp de la serie televisiva de los años sesenta, además, si bien, al igual que en las predecesoras hay un gran desarrollo de los villanos, especialmente del "Joker" interpretado magistralmente por Heath Ledger en una actuación que le valió un Oscar póstumo y que dejó muy atrás al ciertamente siniestro, pero caricaturesco villano de Jack Nicholson, Nolan ha sabido centrar la saga en el personaje del héroe, y en el desarrollo de su personalidad y motivaciones.
Y es que Batman no es el simple súperheroe que se enfrenta a los villanos y los vence, ni es materia de un entretenimiento infantil, las historias del personaje han servido de vehículo para hacer críticas sociales y políticas a EUA y aún a la situación de varias partes del mundo; por sus páginas desfilan desde policías y políticos corruptos, hasta empresarios ambiciosos y voraces, ecologistas radicales, comunistas y anarquistas deshumanizados y crueles, y una sociedad anestesiada ante la violencia, que se ha acostumbrado a vivir con el crimen diariamente, egoístas e indiferentes, ante los que Batman aparece como un personaje que siente odio hacia los delincuentes, pero también un gran resentimiento ante una sociedad de individuos egoístas, cobardes y que se hacen como los que no pasa nada; incluso, ante el resto del Universo DC, Batman es usado para ridiculizar o hacer parodia de los demás héroes: él, sin poderes, puede vencerlos a todos, incluso a Superman, pues demuestra que un hombre común, con base a su inteligencia y habilidad, lo puede lograr todo, más allá de confiarse en cuestiones especiales, mientras su inclusión en la Liga de la Justicia es siempre como el personaje incómodo, el crítico o el que incluso se burla de los extravagantes poderes de un Linterna Verde, por ejemplo, de la aparente perfección del kriptoniano y su a veces, exceso de inocencia, o de la mitología detrás de la Mujer Maravilla.Batman es así, un atisbo de realidad e incluso de racionalidad en un universo de fantasía, un recuerdo de la crueldad del mundo en un panorama colorido.
El cineasta y su hermano Jonathan Nolan, guionista de las tres películas ha bebido directamente de las principales historias de Batman, y que a continuación enlisto para todos aquellos que quieran adentrarse en un personaje que sin duda ha trascendido más allá de las historietas y se ha convertido en arte, no en balde, dibujar o participar en la creación de algún título de Batman es considerado como la cumbre para cualquier libretista o dibujante en el mundo del comic, y para muestra, bastan las siguientes sagas:
- BATMAN: THE DARK KNIGHT RETURNS--De Frank Miller, publicada en 1986, es considerada una de las obras cumbres del "Octavo Arte" de todos los tiempos, nos muestra un héroe ya entrado en los 50 años de edad, que regresa a hacer frente a una Ciudad Gótica decadente y presa del crimen tras años de retiro; encierra una muy aguda crítica a las políticas y a la figura de Ronald Reagan, y en general, a la sociedad norteamericana de los años 80.
- BATMAN: THE KILLING JOKE-- De Alan Moore, publicada en 1987, explora los orígenes del Joker y de la torcida relación de complementariedad, incluso de estima, existente entre el Hombre Murciélago y el Príncipe Payaso del Crimen.
- MUERTE EN LA FAMILIA-- De Jim Sterlin y Jim Aparo, publicada en 1988, refiere el asesinato del segundo Robin, Jason Todd, a manos del Joker, en una terrible crisis para el héroe, como un padre que pierde a su hijo.
- BATMAN: YEAR ONE-- Del propio Frank Miller, publicada entre 1987 y 1988, refiere el primer año de actuación de Batman, uno puede adentrarse en la psicología del personaje, sus motivaciones y la forma en que decidió avocarse a su lucha contra el crimen.
- TEN NIGHTS OF THE BEAST-- Publicada entre 1988 y 1989, de Jim terlin y Jim Aparo, en la que Batman se ve envuelto en los procesos políticos que pusieron fin a la Guerra Fría, enfrentándose al súperheroe/villano soviético KGBestia, contiene una gran crítica tanto al Comunismo como al belicismo norteamericano.
- KNIGHTFALL/KNIGHTQUEST/KNIGHT'S END--De Doug Moench, Chuck Dixon y Jim Aparo, muestra la derrota de Batman a manos de Bane, su sustitución por Jean Paul Valley o Azrael, el anterior asesino al servicio de la organización secreta "Orden de San Dumas", la recuperación de Bruce Wayne de sus heridas y su retorno, la profundidad psicológica de esta saga y la sensación de desesperación e inevitabilidad del destino no tiene desperdicio. Fue publicada entre 1993 y 1994.
- ALL STAR BATMAN & ROBIN--Del año 2005, nuevamente Frank Miller toma al personaje y relata los orígenes de la asociación entre el "Caballero Oscuro" y su joven compañero, saga que generó polémica dada la crueldad y la violencia que se respira en ella, en la que se muestra sin ambages la mente enferma del murciélago.
- BATMAN R.I.P.--Publicada en 2008 y obra de Grant Morrison en el guión y los dibujos de Tony Daniel, constituye un viaje durísimo y angustiante hacia la locura inherente al personaje, al que la organización ocultista "Guante Negro" pretende destruir mentalmente, encabezada por el Dr. Hurt, uno de los personajes más enigmáticos ideados como oposición al héroe. Es simplemente fascinante, pero se requiere de un gran aguante para leerlo sin caer en la desesperación que se respira página a página, en esta saga, además, se aprovechan los elementos del Batman más inocente e inócuo de los años 50 y 60 para convertirlos en rasgos siniestros y demenciales.
En definitiva, Batman es la obra cumbre del comic de superhéroes, y bien vale la pena adentrarse en su mundo, es una experiencia extraordinaria de imaginación y reflexión. Les recomiendo que, de ser posible, consigan y lean las sagas antes señaladas, empezando por la primera en la lista, no se arrepentirán.
LA MATANZA DE AURORA:
Relacionado, desgraciadamente con el estreno de la última película de Batman, viene la matanza registrada en la población de Aurora, conurbada a la capital del estado de Colorado, Denver, en EUA, durante la exhibición, a media noche del filme en su presentación estelar.
Indicar que el asesino John Holmes (en la imagen), que segó la vida de 12 personas e hirió de gravedad a otras 71 se inspiró en el comic, alegando la clara violencia del mismo y que el propio perpetrador dijo ser el Joker es una ligereza; si así fuera, en Japón brutalidades como ésta serían el pan de cada día, puesto que en el ámbito del Manga y el Anime la violencia presentada en las historias es de un grado mayor a cualquier historieta o filme norteamericano, hechos similares a las habituales masacres en EUA, como el envenenamiento con gas sarín en el Metro de Tokio por Shoko Ashahara, líder de la secta budista "Verdad Suprema" o el secuestro, violación y feroz asesinato de la estudiante Junkuo Furuta no tuvieron nada que ver con una imitación de los contenidos violentos de los medios de comunicación, sino con fanatismo religioso y la comisión de crímenes como ritos de iniciación dentro de la mafia "Yakuza", respectivamente.Así, lo hecho por el joven Holmes no tiene que ver con una imitación a lo hecho por personajes de ficción, darle toda la responsabilidad al contenido de una historia del comic, es entrar a la misma simplicidad de los argumentos del psiquiatra norteamericano Frederic Wertham en su obra La Seducción del Inocente, que en el marco del Macarthismo de los años 50 sirvió para ejercer la censura en los comics, al considerarlos como impulsores de conductas violentas, antisociales o de actividades antinorteamericanas.
Por el contrario, el comic y las películas de Batman son violentas porque, en mucho, el personaje refleja y critica muchas de las contradicciones y taras de la sociedad norteamericana, sociedad subdesarrollada, que no ha superado --pese a la elección y presidendia de Obama-- un trauma colonial como la esclavitud y el racismo hacia los negros y demás minorías étnicas, o el exterminio y marginación absoluta de los indígenas, o el habituarse a una vida violenta, de perpetua actitud de colonizador que teme a los peligros y se arma para defenderse de los mismos como si no existieran instituciones garantes de la seguridad ni el Estado de Derecho; ciertamente, el documentalista Michael Moore acertó en "Bowling for Columbine" al definir a la norteamericana como una sociedad poseída por el miedo.
Una sociedad carente de raíces y de identidad, en que el máximo objetivo es el éxito personal y egoísta, representado por dinero, fama o poder, y en que se estimula la competición a niveles extremos, donde el no alcanzar cualquiera de esos tres objetivos representa el fracaso, lleva a la búsqueda de vías de escape: la pornografía y el sexo, las drogas, el alcohol, las sectas extravagantes, y por supuesto, la locura y las armas.
Los legisladores norteamericanos no limitarán el acceso a las armas con reformas constitucionales, no lo harán, por la sencilla razón que las armas son un negocio fabuloso y del cual necesita la deprimida economía de la todavía súperpotencia. Ahí tenemos el caso de "Rápido y Furioso" en el cual hay muchos intereses adentro, como lo demuestra la protección brindada al nefasto Procurador Eric Holder, y es que en ese negocio están metidos tanto miembros del Partido Republicano como del Demócrata.
Las razones, por tanto, de que existan loquitos como James Holmes van más allá de los cómics o de las películas o la TV, son mucho más profundas y el combate a las mismas implicaría una revolución completa en la cultura y la sociedad norteamericanas, lo cual, sin embargo, parece muy lejano, sino imposible, de que suceda.
PHELPS Y OTRAS IMPRESIONES DE LOS JUEGOS:
Si Holmes es un villano real, Phelps es un superdotado real, igualmente; no importa que en estos Juegos de Londres 2012 no esté demostrando sus superioridad avasalladora, sino que haya sido ampliamente superado en la mayoría de las pruebas de natación en las que ha participado, y no es para menos, a sus 27 años, el "Tiburón de Baltimore" como la prensa le llama, es ya un veterano que compite en sus cuartas olimpiadas, mas no importa, solo requería de quedar en tercero o segundo lugar para imponer un nuevo récord, aunque lo logró con un oro en la prueba de relevos 4 X 200 libres: 19 medallas olímpicas: 15 de oro, 2 de plata y 2 de bronce.
Michael Phelps, así, se convierte en el deportista más premiado en la Historia de los Juegos Olímpicos desde 1896, superando a la gimnasta rusa Larissa Latynina, que había acumulado 18 preseas, en los Juegos de Melbourne 1956, Roma 1960 y Tokio 1964. El nadador norteamericano, así, inscribe su nombre en los anales del Deporte, y tiene todo para retirarse enmedio de la gloria.
Mucho se ha censurado a él que ha tenido problemas con el alcohol y la mariguana; ciertamente, sería lamentable que Phelps se precipitara, en la borrachera del triunfo, a la disipación y el vicio, en una inexplicable tendencia que tienen muchas personas exitosas a autodestruirse; pero por otro lado, también es incorrecto pedir al deportista que sea un inmaculado y un "ejemplo para la juventud" ese es un error que frecuentemente, la gente tiene al pensar sobre lo que deberían ser los atletas y los faranduleros, como consecuencia, muchas veces no se toma en cuenta que están tan llenos de defectos como cualquier persona y que muchas veces también pueden caer en errores, vicios o hasta ilícitos.
Por ello, resulta muy sensato el consejo que Latynina dirige a Phelps: "que tenga una vida normal" lo dice alguien que en su momento conoció la fama y la gloria y estuvo sometida también a tentaciones y presiones similares.
Lo que sí, y por lo que se ha visto en estos juegos, será difícil que en adelante vuelva a aparecer una individualidad del tamaño de la Latynina, de Nadia Comanecci, de Carl Lewis, Mark Spitz o Paavo Nurmi; la competencia está más pareja y ya no hay grandes diferencias entre países desarrollados y aquellos que están en vías de desarrollo, deportivamente hablando. Phelps quizá sea el último de esta especie de individualidad a la que, al término de la olimpiada, los analistas y periodistas coronaban como Rey o Reina de los Juegos... curiosamente, podríamos decir que el deporte se ha "democratizado" lo cual, no es malo, al contrario, muestra avances positivos en muchos países en materia de educación y de bienestar.
México ya llega a la final de varios deportes, pero no gana todavía en ellos, como halterofilia o remo y tiro con arco, aunque los Panamericanos dejaron ver la mejora en el deporte en general que ha habido en nuestro país, aún falta el pequeño empujón a la victoria; al menos, en Clavados tenemos a nuestra propia plusmarquista en los Juegos Olímpicos: Paola Espinosa que ha igualado el récord del también clavadista Joaquín Capilla como máximo medallista en los Olímpicos, y lo hizo en compañía de la quinceañera jalisciense Alejandra Orozco, quien era su máxima admiradora, ganando ambas la plata en los clavados sincronizados, algo maravilloso, no se pudo ganar, pero es que a los Chinos no hay quien los pare, van enfilados al campeonato olímpico nuevamente, como hace 4 años en casa.
No cabe duda que estos juegos nos depararán sorpresas, sigamos atentos a su desarrollo.
3 comentarios:
Totalmente cierto lo de Holmes, a esos inocentes los asesinó Norteamérica, no Holmes. Me repugna que pidamos la pena capital para él, mientras aplaudimos y justificamos a otros que hacen peores barbaridades por dinero...
Lo peor de todo, mi estimado Facha, es que ese "estilo de vida norteamericano" se está extendiendo al resto del mundo, y con él, su carga de falta de escrúpulos, su angustia existencial y su materialismo...
Falta "The Long Halloween" y toda la saga de "Cataclysm" y "No man's Land"
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