Este año ha sido muy difícil para México, como ya lo he mencionado anteriormente, no puede negarse que gran parte de la responsabilidad recae sobre el actual gobierno del Presidente Peña, que ha dado muestras de una gran falta de capacidad, pericia y valor para la toma de decisiones; que como hemos dicho, se ha debido no solo a los defectos personales del mandatario, sino a un sistema que no ha podido adaptarse a la nueva realidad: desde el PRI, que fue incapaz de reformarse durante los 12 años que estuvo separado del Poder presidencial y convertirse en un partido político competitivo y mejorar en la selección de sus cuadros; pero también de toda la clase política, conformada en los partidos que han continuado, hasta el día de hoy comportándose como una oligarquía verdadera de dueños del país.
¿Cuándo empezó la crisis mexicana? ¿Porqué nunca hemos podido ir hacia adelante? ¿Porqué somos presa de la corrupción que, curiosamente, no es nuestro mal mayor, pues corrupción de políticos y funcionarios la hay hasta en Noruega aunque nos digan que no, como lo es más bien nuestra mediocridad crónica, misma que se expresa, y nuevamente lo reitero aunque disguste a muchos, cuando nuestras máximas figuras musicales sean de la calaña de José Manuel Figueroa, alias Joan Sebastian o Alberto Aguilera, conocido como Juan Gabriel, del éxito de series de TV donde los héroes son peligrosos delincuentes, o que la fiesta de 15 años de una adolescente potosina se convierta en un acontecimiento nacional.
Los famosos "XV años de Rubí" fueron sin duda una radiografía de nuestra realidad nacional: todo comenzó por un error; como es tradicional en México (aunque afortunadamente, poco a poco cada vez es menos) y en otras partes de Hispanoamérica, se festeja especialmente cuando las mujeres llegan a esa edad; esta fiesta tiene, en realidad como motivo que a partir de esa edad se consideraba que las féminas ya podían ser desposadas, por lo que se daba la "presentación en sociedad" de las señoritas, en particular en las clases altas --en el mundo anglosajón, y en particular en EUA, existe algo similar, pero es a los 16 años, los famosos sweet sixteen, y las así presentadas reciben el apelativo de "debutantes"-- que no era otra cosa más que poner a las adolescentes "ya en edad de merecer", a disposición de los pretendientes que pudiesen aparecer, la realidad es que dichas fiestas se han convertido en escaparates de lo ridículo y de esa forma de ser extravagante en las clases bajas que en México recibe el apelativo de naco, un término de origen indígena que en tiempos prehispánicos era usado como despectivo de los Mexica hacia los Totonaca, habitantes de la costa del Golfo de México en el actual estado de Veracruz; resultando que es precisamente en esos estratos donde más persiste dicha celebración y no en las clases económicamente más pudientes y urbanas, donde, si mucho, se ha cambiado la fiesta por un viaje al extranjero o unos días de vacaciones con amigos y familia en algún sitio de playa.
Todo fue un error, porque después de que la adolescente Rubí Ibarra, hija de un campesino adinerado de un pueblo llamado la Joya en el estado de San Luis Potosí, se tomase la sesión fotográfica con su vestido de gala y en compañía de sus padres en el estudio de un profesional del lente, el papá decidió aprovechar y grabar en vídeo una invitación para subirla a Facebook con la idea de invitar, en origen, a los amigos de la familia y de su hija al festejo: típico de los rancheros ricos, se trataba de una fiesta pueblerina en la que se iba a "echar la casa por la ventana" con grupos musicales y una "chiva de $10,000.00 diez mil pesos", esto es, un premio en dinero a quien ganara una carrera de caballos. El señor sin embargo, con poca pericia en el uso de la red social, no restringió la publicación del vídeo a su lista de contactos o al muro de su hija, sino que se hizo abierta, de forma que todos los usuarios de la plataforma de Mark Zuckerberg podían verla en todo el mundo.
Aquello se hizo "viral" y en pocos días, el vídeo era visto por millones de personas en el país y aún fuera de él, la realidad, es que era una burla: recuérdese, el Mexicano, más que racista es, en realidad, elitista, y para precisamente los sectores urbanos y más "educados" resultaba motivo para hacer sorna cruel de la ingenuidad y buena fe del ranchero, así como de sus rústicas expresiones, del porte adusto y digno de la mamá, y de la ilusión de una jovencita de campo por tener su fiesta de 15 años. Lo peor: se empezó a decir que entonces toda la humanidad estaba invitada y miles y miles de personas confirmaban que asistirían al evento mediante la red social, lo cual no era más que tomarlo a risa. Pero todavía más detestable fue la actitud de los medios ante esto, que se subieron al carro y empezaron a lucrar con todo el revuelo generado. Pronto fueron periodistas hasta el apartado pueblo a entrevistar a la familia, a la propia niña y visitas de ellos a estudios de televisión --es de pensar que por supuesto, al padre de Rubí le brillaron los ojos ante ofertas (engañosas) de fama y fortuna-- con una recepción multitudinaria en el aeropuerto de la capital cuando la quinceañera arribó, en algo tan orquestado y falso como la recepción de Sancho Panza en la Ínsula Barataria, burla de los encumbrados duques al "naco" escudero.
Se sumaron patrocinadores y por supuesto, los políticos: los Gobernadores del Estado de México y de San Luis Potosí asistieron al evento, o el famoso y escandaloso alcalde del puerto de San Blas, Nayarit, que llegó a la fiesta con un coche que regaló a la festejada, incluso, se habla que el Partido Acción Nacional (PAN), ofrece al padre de la quinceañera una futura candidatura. Al final, la fiesta se realizó y fue, efectivamente multitudinaria pero con visos de tragedia: en las imágenes que fueron incluso difundidas por las televisoras, era visible el descontento de Rubí, que parecía ver que la ilusión por su festejo se evaporaba en un escándalo y en un evento que ella no pidió que fuera así, y que ella, una adolescente normal del medio rural se convertía en el mono de feria del momento. Incluso, la fiesta terminó siendo una tragedia con el saldo de dos muertos, siendo el caso más notorio, el del dueño de uno de los caballos que compitió y que fue arrollado por los equinos al galope.
Lo curioso del caso es que los usuarios de las redes sociales en México y que fueron quienes hicieron de lo que en cualquier otro lado hubiese sido un incidente quizá gracioso, pero también sin importancia, como fue la errónea invitación girada al público en general de un festejo familiar, un acontecimiento nacional, luego empezaron a decir que todo era parte de una maniobra distractora del Gobierno ante la pésima gestión económica y el llamado "gasolinazo" o serie de ajustes al precio de los combustibles como paso previo a la liberalización del precio que, como efecto de la Reforma Energética, ocurrirá el próximo año, lo que ha desatado la indignación popular, algo que radica en la pésima estrategia de comunicación de la Administración de Peña, que había prometido que los precios de los energéticos no subirían, en vez de haber hablado con la verdad y decir que el precio de la gasolina se ajustaría en el proceso de que el mismo, como en cualquier otra parte del mundo, se determinaría por la Ley de la Oferta y la Demanda. Por el contrario, ahora todo mundo se ha olvidado de las críticas al modelo estatista a través de PEMEX y despotrica contra las reformas que aún, en realidad, no han entrado en vigor, sin aparte, tener un conocimiento real de lo que está sucediendo, cuando hoy, más que nunca, se puede acceder a la información y saber los pormenores de las reformas.
Lo anterior claro, favorece al eterno candidato presidencial de la Izquierda Andrés Manuel López Obrador, cuyo programa, en pocas palabras, es regresar al sistema económico controlado por el Estado, keynesiano, que fue vigente en los años 70 y que fue, realmente, responsable del estancamiento económico que generó la crisis de 1982, de la cual no hemos salido, y el mexicano, de mala memoria y reacio a las convulsiones que provocan los cambios, desea volver a ello, sin darse cuenta que, en las circunstancias actuales, no se podría mantener dicho sistema.
Pero esto es muy representativo: la misma gente, el público, generó el fenómeno de los XV años de Rubí, pero al final, tiene la culpa el Gobierno. Ante la Reforma Energética y el shock que genera su implementación, la culpa también es del Gobierno, pues éste nos debe garantizar que todo sea barato, que todo sea fácil, que no haya turbulencias. Lo que sí, ciertamente, nuestros políticos aprovechan de todo para mantenerse arriba, con independencia de los partidos políticos a los que pertenezcan y nos venden una iniciativa de un "Sistema Nacional Anticorrupción" que sólo consiste en crear más burocracia para controlar a la burocracia.
¿Porqué somos así? ¿Porqué nos pasa todo esto? ¿Es culpa del PRI? ¿De Trump? ¿De los Españoles?
En realidad, yo lo sostengo, es fruto sobre todo de la forma y los motivos de nuestra Independencia, y en parte sí, de la herencia de los Españoles que se han creído la "Leyenda Negra" que les construyeron sus rivales: Ingleses y Franceses, y los pueblos de las zonas que controlaban en Europa más allá de la península: Italianos y Holandeses desde el siglo XVI como parte de la propaganda de guerra. Los Españoles, como ya lo decía Bismarck, parecen avergonzarse de serlo y parece también, como lo demuestran movimientos políticos actuales como Podemos y los separatismos vasco y catalán, querer autodestruirse. El mexicano, por supuesto que heredó esa misma tendencia a la autodenigración, que no lo deja mirar hacia arriba ni soltar amarras respecto del pasado.
Por otro lado, heredamos también de nuestras raíces grecolatinas, lo mismo que Españoles, Franceses, Italianos, Portugueses, Rumanos y Griegos actuales una tendencia a una política cuyo combustible en mucho es la envidia, el revanchismo y la ambición personal por encima del servicio público: basta leer en cualquier libro de Historia la convulsa vida de Atenas u otra polis griega antigua, o la República Romana, para darnos cuenta cómo suceden en ella los mismos fenómenos que vemos en nuestros gobiernos actuales, corrupción incluida y por supuesto, revoluciones violentas que consisten en luchas sangrientas por el poder entre los miembros de las élites en las que los muertos los pone el pueblo que sigue a caudillos que les prometen el paraíso en la Tierra sin que esto sea real. En esos lejanos antecedentes, se traza que los intentos democráticos acabaron en desastre y que el orden y el progreso, al final, se consiguió con autoritarismos que pusieron fin a las luchas estériles por el poder: con las Monarquías Helenísticas primero y el Imperio Romano después, como en México, que las etapas de desarrollo han sido aquellas en que no ha habido Democracia: el Virreinato, el Porfiriato y la etapa de apogeo del PRI de los años 30 a 70.
Se habla también si el mestizaje provocó alguna especie de "tara" que nos hace ser frívolos y corruptos, pero no es así; países donde no hubo mestizaje, como Argentina, muestran tener los mismos problemas o incluso más en otros casos, que México, y países mestizos como Nueva Zelanda --los Maoríes están emparentados cercanamente con los indígenas americanos y los Japoneses, por ejemplo-- no muestran esas tendencias de las que nos quejamos, aunque cabe decir que el esfuerzo por integrar a los indígenas a la Civilización Occidental por parte de los misioneros en la Epoca Virreinal y que sigue inacabado al día de hoy, aunque fue la República independiente la que los marginó en realidad, quizá distrajo muchos recursos y energías que se hubieran dedicado a otros rubros, sin embargo, el no exterminio de los indígenas, sino la búsqueda de dignificarlos fue algo muy propio del Imperio Español que por sí debería enorgullecer a los ibéricos y por su obra civilizadora, como lo reconocía el mismísimo Francis Drake, --enemigo de España por su deber hacia su reina Isabel I, pero en realidad gran admirador de los hispanos-- situarlos a la altura de los Romanos.
Pero ya en lo particular, está el caso de nuestra Independencia: al finalizar el siglo XVIII, la Nueva España era posiblemente el país con el nivel de vida más elevado en el Mundo Occidental y era una verdadera potencia económica: la pobreza y la desigualdad, por otro lado, se daba en todos lados, y quizá, como lo señaló Humboldt, era mucho peor en países como Rusia o los propios Estados alemanes de donde él provenía, y ni se diga Inglaterra, donde los barrios populares de Londres eran realmente dantescos, o incluso se daba en Escocia la existencia de colonias o barrios subterráneos en Edimburgo donde los sin techo habían construido catacumbas en las que habitaban en condiciones infrahumanas. Las propias 13 Colonias británicas de donde surgió EUA estaban en realidad subdesarrolladas, aunque precisamente habían comenzado una etapa de ascenso de la que se quisieron aprovechar los británicos tras la Guerra de los 7 Años, lo que desencadenó la Guerra de Independencia. Posteriormente, los aristócratas locales se enfocaron en un proyecto de desarrollo y de expansión que desembocó en que EUA se convertiría a fines del siglo XIX en una verdadera potencia mundial.
En el caso mexicano ocurrió lo contrario: la Nueva España estaba muy desarrollada, pero descansaba en un sistema que no había cambiado desde la conquista y colonización en el siglo XVI con un sistema basado en el mercantilismo y con grandes resabios del feudalismo de fines de la Edad Media, combinado con grandes partes del sistema prehispánico, semifeudal y comunitarista que les beneficiaba enormemente; entre tanto, en España, con la llegada de los Borbón, estos empezaron a desarrollar una serie de reformas a fin de modernizar la economía española y embarcarla junto al resto de Europa en el camino de la Ilustración y la Revolución Industrial, lo cual no convenía a los aristócratas criollos que no querían perder sus privilegios; por el contrario, desearon conservarlos haciéndose dueños del país, incluso esto queda claro cuando se lee la narración que hace Jefferson de una conversación que sostiene en París con un mexicano de la aristocracia criolla, así como de sus reuniones con Humboldt, de donde salió cómo los criollos, que se convertirían en la élite política de México, estaban dispuestos a vender todo con tal de hacerse propietarios del país y manejar al resto de la población como sus lacayos. De esas conversaciones salió después todo el plan sostenido por los Liberales, de debilitar a la Iglesia Católica como elemento de cohesión de la sociedad, y de mantener arriba a unos cuantos que querían evitar precisamente el ascenso de los demás para no romper con sus privilegios.
La lucha entre Liberales y Conservadores sería una lucha interna de la élite con la visión pro-yankee por un lado y la visión pro-europea por otra, aunque los Conservadores en realidad eran más nacionalistas y querían un cambio del sistema con adaptaciones para hacerlo competitivo; los Liberales en cambio, con sus reformas, como fue el caso de la propiedad rural, hundieron a los indígenas y campesinos al hacerlos presa de los latifundistas y crearon una sociedad de doble moral, dividida y materialista al ir minando la religiosidad y promoviendo una laicidad jacobina, manteniendo un sistema de ascensos en base a relaciones y familias y no a la promoción del mérito.
La Revolución fue un conflicto generacional de entre los mismos Liberales, y hoy, sus descendientes son nuestra Clase Política, que sigue manejando al país como si fuese sus calcetines, lo han esquilmado y han corrompido a la sociedad.
¿Qué podemos hacer? Primero que nada, cambiar nosotros mismos en lo individual: adoptar un código moral que vaya más allá de lo que nos venden los medios de comunicación o nos imponen las modas y procurar ser congruente con ellos mismos. Estudiar y conocer nuestras raíces, más allá de lo indígena demasiado impuesto y sobrevalorado para ideológicamente, manipularnos haciéndonos creer los eternamente vencidos y víctimas de una injusticia histórica y no querernos levantar, para sentirnos orgullosos herederos de imperios del pasado, como los Mexica, pero también la España imperial, Roma y Grecia, romper con la Historia Oficial, y sus héroes de papel como Hidalgo o Juárez, quienes en realidad le causaron un daño inmenso al país, sin duda sería un gran acto de liberación que podemos hacer.
Hacer lo correcto en nuestro ámbito individual, participar activamente en comunidades o grupos que por sí mismos resuelvan los problemas, no irnos a las protestas fáciles, más cuando las mismas son encabezadas o alentadas por líderes políticos que buscan sacar provecho de ello, sino trabajar, pensar y estudiar, son las armas como cambiaremos el destino de nuestro país y de nosotros mismos. La revolución que necesita México no es política ni social, es ante todo moral e implica el deseo de la gente por salir adelante y por no echarle la culpa al Gobierno, a la Iglesia, a los Gringos, a los Franceses o a los Españoles de lo que pasa, es agarrar el toro por los cuernos y salir adelante por nosotros mismos. De lo contrario, seremos tan tontos como todos aquellos que engrandecieron lo de la quinceañera Rubí y luego todavía le echaron la culpa al Gobierno y Televisa de generar un distractor que ellos mismos habían creado.
Lo anterior claro, favorece al eterno candidato presidencial de la Izquierda Andrés Manuel López Obrador, cuyo programa, en pocas palabras, es regresar al sistema económico controlado por el Estado, keynesiano, que fue vigente en los años 70 y que fue, realmente, responsable del estancamiento económico que generó la crisis de 1982, de la cual no hemos salido, y el mexicano, de mala memoria y reacio a las convulsiones que provocan los cambios, desea volver a ello, sin darse cuenta que, en las circunstancias actuales, no se podría mantener dicho sistema.
Pero esto es muy representativo: la misma gente, el público, generó el fenómeno de los XV años de Rubí, pero al final, tiene la culpa el Gobierno. Ante la Reforma Energética y el shock que genera su implementación, la culpa también es del Gobierno, pues éste nos debe garantizar que todo sea barato, que todo sea fácil, que no haya turbulencias. Lo que sí, ciertamente, nuestros políticos aprovechan de todo para mantenerse arriba, con independencia de los partidos políticos a los que pertenezcan y nos venden una iniciativa de un "Sistema Nacional Anticorrupción" que sólo consiste en crear más burocracia para controlar a la burocracia.
¿Porqué somos así? ¿Porqué nos pasa todo esto? ¿Es culpa del PRI? ¿De Trump? ¿De los Españoles?
En realidad, yo lo sostengo, es fruto sobre todo de la forma y los motivos de nuestra Independencia, y en parte sí, de la herencia de los Españoles que se han creído la "Leyenda Negra" que les construyeron sus rivales: Ingleses y Franceses, y los pueblos de las zonas que controlaban en Europa más allá de la península: Italianos y Holandeses desde el siglo XVI como parte de la propaganda de guerra. Los Españoles, como ya lo decía Bismarck, parecen avergonzarse de serlo y parece también, como lo demuestran movimientos políticos actuales como Podemos y los separatismos vasco y catalán, querer autodestruirse. El mexicano, por supuesto que heredó esa misma tendencia a la autodenigración, que no lo deja mirar hacia arriba ni soltar amarras respecto del pasado.
Por otro lado, heredamos también de nuestras raíces grecolatinas, lo mismo que Españoles, Franceses, Italianos, Portugueses, Rumanos y Griegos actuales una tendencia a una política cuyo combustible en mucho es la envidia, el revanchismo y la ambición personal por encima del servicio público: basta leer en cualquier libro de Historia la convulsa vida de Atenas u otra polis griega antigua, o la República Romana, para darnos cuenta cómo suceden en ella los mismos fenómenos que vemos en nuestros gobiernos actuales, corrupción incluida y por supuesto, revoluciones violentas que consisten en luchas sangrientas por el poder entre los miembros de las élites en las que los muertos los pone el pueblo que sigue a caudillos que les prometen el paraíso en la Tierra sin que esto sea real. En esos lejanos antecedentes, se traza que los intentos democráticos acabaron en desastre y que el orden y el progreso, al final, se consiguió con autoritarismos que pusieron fin a las luchas estériles por el poder: con las Monarquías Helenísticas primero y el Imperio Romano después, como en México, que las etapas de desarrollo han sido aquellas en que no ha habido Democracia: el Virreinato, el Porfiriato y la etapa de apogeo del PRI de los años 30 a 70.
Se habla también si el mestizaje provocó alguna especie de "tara" que nos hace ser frívolos y corruptos, pero no es así; países donde no hubo mestizaje, como Argentina, muestran tener los mismos problemas o incluso más en otros casos, que México, y países mestizos como Nueva Zelanda --los Maoríes están emparentados cercanamente con los indígenas americanos y los Japoneses, por ejemplo-- no muestran esas tendencias de las que nos quejamos, aunque cabe decir que el esfuerzo por integrar a los indígenas a la Civilización Occidental por parte de los misioneros en la Epoca Virreinal y que sigue inacabado al día de hoy, aunque fue la República independiente la que los marginó en realidad, quizá distrajo muchos recursos y energías que se hubieran dedicado a otros rubros, sin embargo, el no exterminio de los indígenas, sino la búsqueda de dignificarlos fue algo muy propio del Imperio Español que por sí debería enorgullecer a los ibéricos y por su obra civilizadora, como lo reconocía el mismísimo Francis Drake, --enemigo de España por su deber hacia su reina Isabel I, pero en realidad gran admirador de los hispanos-- situarlos a la altura de los Romanos.
Pero ya en lo particular, está el caso de nuestra Independencia: al finalizar el siglo XVIII, la Nueva España era posiblemente el país con el nivel de vida más elevado en el Mundo Occidental y era una verdadera potencia económica: la pobreza y la desigualdad, por otro lado, se daba en todos lados, y quizá, como lo señaló Humboldt, era mucho peor en países como Rusia o los propios Estados alemanes de donde él provenía, y ni se diga Inglaterra, donde los barrios populares de Londres eran realmente dantescos, o incluso se daba en Escocia la existencia de colonias o barrios subterráneos en Edimburgo donde los sin techo habían construido catacumbas en las que habitaban en condiciones infrahumanas. Las propias 13 Colonias británicas de donde surgió EUA estaban en realidad subdesarrolladas, aunque precisamente habían comenzado una etapa de ascenso de la que se quisieron aprovechar los británicos tras la Guerra de los 7 Años, lo que desencadenó la Guerra de Independencia. Posteriormente, los aristócratas locales se enfocaron en un proyecto de desarrollo y de expansión que desembocó en que EUA se convertiría a fines del siglo XIX en una verdadera potencia mundial.
En el caso mexicano ocurrió lo contrario: la Nueva España estaba muy desarrollada, pero descansaba en un sistema que no había cambiado desde la conquista y colonización en el siglo XVI con un sistema basado en el mercantilismo y con grandes resabios del feudalismo de fines de la Edad Media, combinado con grandes partes del sistema prehispánico, semifeudal y comunitarista que les beneficiaba enormemente; entre tanto, en España, con la llegada de los Borbón, estos empezaron a desarrollar una serie de reformas a fin de modernizar la economía española y embarcarla junto al resto de Europa en el camino de la Ilustración y la Revolución Industrial, lo cual no convenía a los aristócratas criollos que no querían perder sus privilegios; por el contrario, desearon conservarlos haciéndose dueños del país, incluso esto queda claro cuando se lee la narración que hace Jefferson de una conversación que sostiene en París con un mexicano de la aristocracia criolla, así como de sus reuniones con Humboldt, de donde salió cómo los criollos, que se convertirían en la élite política de México, estaban dispuestos a vender todo con tal de hacerse propietarios del país y manejar al resto de la población como sus lacayos. De esas conversaciones salió después todo el plan sostenido por los Liberales, de debilitar a la Iglesia Católica como elemento de cohesión de la sociedad, y de mantener arriba a unos cuantos que querían evitar precisamente el ascenso de los demás para no romper con sus privilegios.
La lucha entre Liberales y Conservadores sería una lucha interna de la élite con la visión pro-yankee por un lado y la visión pro-europea por otra, aunque los Conservadores en realidad eran más nacionalistas y querían un cambio del sistema con adaptaciones para hacerlo competitivo; los Liberales en cambio, con sus reformas, como fue el caso de la propiedad rural, hundieron a los indígenas y campesinos al hacerlos presa de los latifundistas y crearon una sociedad de doble moral, dividida y materialista al ir minando la religiosidad y promoviendo una laicidad jacobina, manteniendo un sistema de ascensos en base a relaciones y familias y no a la promoción del mérito.
La Revolución fue un conflicto generacional de entre los mismos Liberales, y hoy, sus descendientes son nuestra Clase Política, que sigue manejando al país como si fuese sus calcetines, lo han esquilmado y han corrompido a la sociedad.
¿Qué podemos hacer? Primero que nada, cambiar nosotros mismos en lo individual: adoptar un código moral que vaya más allá de lo que nos venden los medios de comunicación o nos imponen las modas y procurar ser congruente con ellos mismos. Estudiar y conocer nuestras raíces, más allá de lo indígena demasiado impuesto y sobrevalorado para ideológicamente, manipularnos haciéndonos creer los eternamente vencidos y víctimas de una injusticia histórica y no querernos levantar, para sentirnos orgullosos herederos de imperios del pasado, como los Mexica, pero también la España imperial, Roma y Grecia, romper con la Historia Oficial, y sus héroes de papel como Hidalgo o Juárez, quienes en realidad le causaron un daño inmenso al país, sin duda sería un gran acto de liberación que podemos hacer.
Hacer lo correcto en nuestro ámbito individual, participar activamente en comunidades o grupos que por sí mismos resuelvan los problemas, no irnos a las protestas fáciles, más cuando las mismas son encabezadas o alentadas por líderes políticos que buscan sacar provecho de ello, sino trabajar, pensar y estudiar, son las armas como cambiaremos el destino de nuestro país y de nosotros mismos. La revolución que necesita México no es política ni social, es ante todo moral e implica el deseo de la gente por salir adelante y por no echarle la culpa al Gobierno, a la Iglesia, a los Gringos, a los Franceses o a los Españoles de lo que pasa, es agarrar el toro por los cuernos y salir adelante por nosotros mismos. De lo contrario, seremos tan tontos como todos aquellos que engrandecieron lo de la quinceañera Rubí y luego todavía le echaron la culpa al Gobierno y Televisa de generar un distractor que ellos mismos habían creado.
9 comentarios:
En que libro o pagina de internet puedo ver lo de la reunión de Jefferson con los insurgentes?
Aquí está el enlace a ese recuento de Thomas Jefferson con un mexicano que le describe la situación del Virreinato:
https://www.monticello.org/site/research-and-collections/mexico
Lamentablemente entre la mayoría de los mexicanos no existe la memoria histórica, piensa que la mayoría de sus problemas son de años recientes. Lo que me temo es que López Obrador representa al PRI de los años setenta, pero la falta de memoria impide ver que esas políticas fueron las que nos hundieron aquí en primer lugar. Además hay que analizar la principal mentira que vende la izquierda: "el neoliberalismo es la causa de todos los males actuales de México", cuando este modelo nunca se implementó.
mejicana EX CATÓLICA EX NUEVA ERA dice muchas cosas inexactas de la iglesia católica pero su experiencia de la nueva era es reveladora.
https://www.youtube.com/playlist?list=PLGuN5ByPu9eTij2e09LwfcMHuUjdFu_hu
El Testimonio de Arella : Serie Completa sobre la Nueva Era
Arella Eliora8 videos1,057 vistasSe actualizó por última vez el 9 ene. 2017
Serie de videos narrando ahora con detalle mi experiencia sobre aquello que me llevó a la nueva era, esoterismo, canalización,etc. Trataré en cada video de dar los mayores detalles posibles de mi camino, desde el inicio hasta mi sanación y desprogramación, la cual continúa pues es un proceso constante de reconexión con el Cread
ALGO GRAVE PODRÍA OCURRIR EN EE.UU: MILES DE PÁJAROS NEGROS INVADEN HOUSTON
RIMBEL35
RIMBEL35
Virginia ZayasHace 6 horas (editado)
La pobreza "cero" la habrían podido lograr si hubieran eliminado el IVA y reducido impuestos innecesarios, no es imposible pero nadie se atreve a eso. Los impuestos empobrecen a la gente, a todos los trabajadores de clase baja y media, no van destinados a ningún servicio ni obra pública, se lo roban los políticos y empresarios desde siempre. Sin impuestos hay simplemente oferta y demanda, sin corrupción fiscal. El que produce bienes y el que ofrece servicios, y que crea fuente laboral y da empleo a la gente no debe pagar ningún impuesto sino sólo cumplir con el contrato comercial e industrial debidos para un sueldo digno...... El resto viene solo, porque así todos pueden pagar SIN problemas lo que necesiten y lo que quieran tener. No es lo único pero sí lo primero que hay que hacer a corto plazo, porque la pobreza mata a corto plazo, y lo otro que hay que hacer es una ley como México (producto del aprendizaje por la pérdida de tierras a favor de EEUU), que impide vender territorios a extranjeros y además esto en Argentina tenemos que extenderlo a empresas e industrias nacionales.
https://youtu.be/nUXoOysLz7c
Virginia ZayasHace 6 horas (editado)
La pobreza "cero" la habrían podido lograr si hubieran eliminado el IVA y reducido impuestos innecesarios, no es imposible pero nadie se atreve a eso. Los impuestos empobrecen a la gente, a todos los trabajadores de clase baja y media, no van destinados a ningún servicio ni obra pública, se lo roban los políticos y empresarios desde siempre. Sin impuestos hay simplemente oferta y demanda, sin corrupción fiscal. El que produce bienes y el que ofrece servicios, y que crea fuente laboral y da empleo a la gente no debe pagar ningún impuesto sino sólo cumplir con el contrato comercial e industrial debidos para un sueldo digno...... El resto viene solo, porque así todos pueden pagar SIN problemas lo que necesiten y lo que quieran tener. No es lo único pero sí lo primero que hay que hacer a corto plazo, porque la pobreza mata a corto plazo, y lo otro que hay que hacer es una ley como México (producto del aprendizaje por la pérdida de tierras a favor de EEUU), que impide vender territorios a extranjeros y además esto en Argentina tenemos que extenderlo a empresas e industrias nacionales.
https://youtu.be/nUXoOysLz7c
ALGO GRAVE PODRÍA OCURRIR EN EE.UU: MILES DE PÁJAROS NEGROS INVADEN HOUSTON
RIMBEL35
Publicado el 9 feb. 2017
Hola,
Descubrí este blog por casualidad hace unos días, y estoy verdaderamente impresionado, es simplemente magnífico.
Un abrazo enorme, enhorabuena.
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