El pasado 24 de enero fue el "Discurso sobre el Estado de la Unión", o sea, informe de Gobierno, y tras algunos días y viendo los acontecimientos recientes, a tono con lo que habíamos dicho en el post anterior, podemos concluir que Obama sigue siendo un excelente orador, que emplea las palabras y los modos necesarios y suficientes para decir lo que la gente quiere oir y despertar en las personas emociones y aplausos; en pocas palabras, es un demagogo consumado.
De hecho, al ver el informe, uno no puede negar cómo EUA está sumido en el proceso de "latinoamericanización", a cada frase, los diputados y senadores Demócratas saltaban disparados de la curul como por un resorte e iniciaban una ronda de aplausos como, en otros tiempos, ocurría con los fieles priístas disciplinados en México en los informes del Presidente, los Republicanos, por su parte, igual que hacían los Panistas o Perredistas, se mantenían pegados a sus asientos con el ceño fruncido o sonrisas irónicas... al menos, no hubo imprecaciones al "estilo Porfirio Muñoz Ledo", como empezó a destilar la Izquierda Mexicana a fines de los 80, o se presentaron en los años pasados en que pudimos escuchar que al mandatario afroamericano le gritaron: "Liar, liar!" (mentiroso) varias veces, ahora hubo mayor compostura.
El discurso fue ante todo triunfal y optimista, así como una presentación de su programa de Gobierno en caso de ser reelegido en noviembre próximo. Entre líneas, sin embargo, se pueden detectar los problemas, graves, a los que se está enfrentando la todavía súperpotencia:
1.- El excesivo gasto público y la necesidad de obtención de recursos para afrontarlo.
2.- Desempleo.
3.- Deterioro en el sistema educativo, incluso a nivel superior.
4.- Parálisis en la investigación científica y tecnológica.
5.- Infraestructuras avejentadas, insuficientes para la época actual o en mal estado.
6.- La cuestión migratoria.
7.- Los retos en política exterior, en particular, el ascenso de China y otros emergentes, y la pérdida de influencia de EUA.
A pesar de que resulta claro que el Mandatario tiene claros cuáles son los problemas, parece que no tiene claras las rutas para buscar las soluciones; incluso, pareciera que las propuestas para enfrentarlos contribuirán, en realidad, a complicarlos más.
Obama propone, en resumidas cuentas, el Keynesianismo más puro: gasto público al por mayor, pues el Gobierno entra directamente en la actividad económica: un programa de renovación de infraestructuras en materia de comunicaciones y transportes, que generará empleos y movimientos económicos, aplicando los ahorros provenientes del cese de la Guerra en Irak, programas de becas tanto del Gobierno Federal como de los estados para las Universidades y para fomentar la investigación en los laboratorios científicos gubernamentales y privados, la captación de talentos de entre los inmigrantes, por lo que exhorta a los Legisladores, sobre todo Republicanos, a aprobar (por enésima vez, el mismo discurso desde la época de Bush) una Reforma Migratoria definitiva, continuar aportando recursos para los programas asistencialistas, y para obtener la ingente cantidad de dinero que necesitará para sostener todo esto, una agresiva política fiscal redistributiva que se centre en cobrarle impuestos más altos a los ricos, como si se tratase de castigar la riqueza, y sobre todo, al empresariado, que ante un ascenso de los impuestos optarán, ni duda cabe, por sacar su capital del país e invertirlo en lugares donde haya estímulos fiscales, dirigidos precisamente, a atraer inversiones; esto, por supuesto, repercutirá en todo lo demás.
Quien impulsó esto no fue otro que Warren Buffett, uno de los hombres más ricos del mundo, pero cuyos negocios no son actividades productivas, sino la especulación financiera y para quien la subida de impuestos serán como quitarle,en lugar de una pluma, dos, a una gallina, pero a muchos que se dedican a empresas que realmente producen bienes y servicios necesarios, sí les representará un descalabro, más a los medianos y pequeños empresarios.
Por otro lado, Obama continúa en el mundo de las incongruencias: habla de estimular al Internet, pero el golpe a Megaupload (y con ello la muestra de que en realidad estaba de acuerdo con la Ley SOPA) acredita su compromiso con el lobby hooliwodense y las agencias de seguridad en una política dirigida, sin duda, a controlar Internet, y qué decir de lacuestión migratoria, como siempre, busca pasarles la bolita a los Republicanos, a fin de que el electorado hispano le eche la culpa al partido del elefante de la difícil situación en la que se encuentran ahora los inmigrantes, y generar la imagen de que el Partido conservador es racista y excluyente, lo cual es falso; incluso quien respondió, en CNN, al Informe presentado por el Ejecutivo resulta ser el Representante Francisco "Kiko" Canseco del estado de Texas, (magnífica respuesta, además) quien es de origen mexicano y militante Republicano, además de que se olvidan de un probable aspirante futuro a la Casa Blanca: el joven senador por Florida de origen cubano: Marco Rubio, quien además contó con el apoyo del "Tea Party" para llegar al Capitolio.
Entre tanto, Obama continúa su programa de deportaciones, que le ha llevado a romper todos los récords en la materia, y sigue perdida la bolita sobre el supuesto operativo "Rápido y Furioso" que más suena a negocio de venta de armas a investigación policial seria.
Como también Obama habla de estimular los proyectos de energías alternativas a fin de reducir la dependencia energética del exterior, pero evidentemente no habla de SOLINDRA, empresa dedicada a la energía solar y que recibió un jugoso financiamiento del Gobierno del Afroamericano, para casi inmediatamente después, declararse en quiebra... y de los fondos públicos recibidos?? nadie sabe nada...
Igualmente, y pese a que los medios holywoodenses se empeñan en darnos una imagen de la sociedad norteamericana como una sociedad progresista y liberada, la realidad es que la mentalidad del público en EUA está virando hacia posiciones más conservadoras: la marcha contra el aborto celebrada un día antes del informe, muestra también el hartazgo contra tanto "progresismo" e izquierdismo del Mandatario de parte de una enorme parte de la población.
Y podríamos sumar más cosas: el endeudamiento público coloca cada vez más a EUA a la merced de intereses extranjeros, particularmente chinos, mientras que el pulso con Irán manifiesta el poder de intereses extranjeros, esta vez, el "Lobby Judío" sobre la toma de decisiones de la Administración, cosa que, por otro lado, también aceptarían los Republicanos, y sin las ambigüedades o "chances" que ha dado el actual Gobierno, que sin duda, con su intervención a favor de la "Primavera Arabe" ha colaborado enormemente al empoderamiento de los radicales islamistas en Medio Oriente y a socavar, incluso, la propia posición de EUA en la región.
Ante todo esto, es claro que sería posible la derrota en las urnas del actual presidente, pero no será así, los Republicanos, como lo apuntábamos en el post anterior, están muy ocupados en destrozarse entre sí y en ofrecer posturas radicalizadas y enfrentadas entre sí. Veamos que ocurre durante el año.
No hay comentarios:
Publicar un comentario