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30 de julio de 2010

CARTA ABIERTA A CALDERON Y A LA CLASE POLITICA



Mtro. Felipe de Jesús Calderón Hinojosa
Presidente Constitucional
de los Estados Unidos Mexicanos
P R E S E N T E:

Me dirijo a Usted tanto como Presidente de la República y como máximo representante de la Clase Política de nuestro país; me complace verlo en la inauguración del nuevo estadio de las Chivas del Club Guadalajara justo en un día en que el ejército nacional eliminaba a otro narcotraficante más en esta misma ciudad, que ha perdido su tranquilidad y tiene una perspectiva sombría de lo que se venga a continuación; desgraciadamente, estamos hablando de terroristas que no dirigen sus rencores contra quienes directamente afectan sus intereses, sino hacia la población civil como una forma de debilitar al Estado de Derecho y al orden social.

Este año, en el que por avatares de los constantes concliftos entre ustedes los políticos se celebra indebidamente el bicentenario de nuestra independencia, para lo cual, en realidad, faltan 11 años, y el centenario de la vez en que con mayor ferocidad y crueldad sus antecesores se enfrentaron por el poder ante la ancianidad de Don Porfirio Díaz, hombre que mientras tuvo vigor los mantuvo quietos y permitió que este país apenas mostrara un poco del enorme potencial que tiene.

Nos piden que celebremos: ¿Qué podemos celebrar? es una pena comprobar cada que uno decide irse de vacaciones a una ciudad colonial que en los 300 años en que la Nueva España perteneció al inmenso y poderoso Imperio Español fue una potencia económica con una de las monedas de mayor circulación y más respetadas en el comercio internacional, que tuvo ciudades esplendorosas, ejemplo de urbanismo y de desarrollo, con un nivel de vida mayor al alcanzado en Europa en esos mismos años, con instituciones educativas que ciertamente no cubrieron a toda la población, --pero, vaya, no creo que en la actualidad se entienda que la Educación en sí misma es elitista, ni mucho menos uds. los políticos que han hecho de la educación una cosa masificada, hecha para extender la mediocridad a todos-- y que sin embargo creó una elite científica, humanista y artística altamente formada, culta y consciente. Desde 1821, desgraciadamente, ninguno de los Gobiernos: liberales o conservadores, han logrado hacer algo semejante, Don Porfirio, como dijimos, lo intentó, no le iba a alcanzar la vida, pero tampoco uds. le dejaron terminar su obra ni dejar bases para el futuro.

No, Ustedes, los Gómez Farías, los Santa Annas, los Juárez, los Madero, los Huerta y de la Huertas, los Obregón, los Calles, los Cárdenas, Echeverrías, Zedillos, AMLOS, Foxes, Fernandez de Cevallos, Ebrardes, Creeles y como Usted, Sr. Calderón, son los que han hecho hasta lo imposible por hundir este país, por hacerlo dócil vasallo de otros intereses, como Usted que ahora nos ha metido en una guerra contra el Narcotráfico sólo para defender a los Gringos sin ningún provecho; cierto, hay que frenar el crimen en México, pero las drogas no solo se combaten con las armas, también con educación, con empleo y oportunidades, ¡cuántos capos no hubieran sido grandes empresarios agrícolas y ganaderos de haber tenido chance de desplegarse en negocios lícitos! pero Usted y los políticos se han dedicado a convertir el campo en algo improductivo y donde campea la miseria, obligándo a muchos a seguir la senda del crimen, y no solo eso, en las ciudades, los jóvenes no tienen más perspectivas que el crimen y la violencia ante las nulas posibilidades de ascenso social y la carencia de empleo. Y así, ahora nosotros ponemos los muertos para evitar que los gringuitos se droguen, aunque la verdad, eso no les interesa a los políticos norteamericanos, que no son muy diferentes a Ustedes, también quieren tener una población de viciosos y mangoneados para hacer sus negocios.

Ustedes nos han quitado todo en estos 200 años: nos han arrebatado la fe, persiguieron a la Iglesia porque logró lo que ustedes no han podido: cohesionar, educar, unir, y después qué han hecho? la corrompieron y se coludieron con malos pastores como Maciel, Zepeda, Sandoval... y han metido sectas de las más estrambóticas y desquiciadas para dividirnos y arrebatarnos la esperanza y la moral.

Nos han robado la tranquilidad y la seguridad, que por momentos nos hizo sentir afortunados de vivir en este país como un remanso en un mundo convulso.

Nos han robado la hombría, la feminidad y la decencia, para ahora pretender volvernos unos depravados estúpidos y tener como modelos unos faranduleros viciosos, fríviolos y vulgares.

Nos pretenden robar a la familia, nuestro orgullo y nuestro núcleo, para volverla un lugar violento e infernal, o para pretender hacer experimentos aberrantes. Ahora la Izquierda, que continúa con su labor destructiva, quiere quitarle la dignidad a las mexicanas para volverlas fábricas de niños con su Ley de Subrogación de Vientres, para fomentar el "turismo eugenésico" en nuestro país, eso de que sea sin fines de lucro es falso totalmente, seguramente es otro negocio que se tienen entre manos, como las células madre o los cosméticos que se obtienen de niños abortados.

Nos han robado la prosperidad, Ustedes los políticos en 200 años no han construido un Estado funcional que nos brinde servicios decentes y nos resuelva los problemas, construyeron un sistema que les permite aprovecharse de nuestras riquezas nacionales y siempre salir beneficiados, Ustedes y sus allegados, por supuesto.

Nos han robado la inteligencia, la educación nacional produce fracasados y mediocres, en su lugar, la farándula y la TV es la que educa en todo lo negativo que se pueda imaginar.

Así, que en este Bicentenario no hay nada que festejar, al menos por nosotros los ciudadanos, Ustedes los políticos sí festejarán: Lo han logrado, tras 200 años, tienen a México en la lona, casi siendo un Estado fallido... FELICIDADES...
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Lo anterior lo escribí en un momento de indignación y preocupación, no sé si otros más estén igual. Ahí les dejo esta reflexión.

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